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ACAFREMIN, realiza su cuarto encuentro con representantes de la región centroamericana donde se reúnen diversas organizaciones sociales, ambientalistas, indígenas y de derechos humanos donde trataron temas en común sobre extracción de recursos naturales. Foto Diario Co Latino/Karla Rodas.

Centroamérica: una historia en común de extracción de recursos naturales

Gloria Silvia Orellana
@SilviaCoLatino

Centroamérica es considerado un “corredor biológico”, que cuenta con un clima viable para la flora, fauna, que permitió la vida de asentamientos humanos ancestrales y es también motivo por el cual, mega corporaciones internacionales extractivas se mantienen en la región en búsqueda de los preciosos recursos naturales, explicó Julio González, representante de Madre Selva de Guatemala.

“Los bosques principalmente son los responsables que exista tanta biodiversidad, en nuestros países, al estar en el cinturón de América pudimos recibir bastante material genético de diversidad de especies y somos productores de agua verde debido a los bosques. Sin embargo, el modelo económico impuesto es lo que nos está causando estos grandes cambios que experimentamos y que comenzó con la Revolución Industrial”, reseñó González.

En el IV Encuentro de ACAFREMIN, que se realiza entre 24 al 26 de abril, diversas organizaciones sociales, ambientalistas, indígenas y de derechos humanos se dan cita para intercambiar experiencias locales, consolidar esfuerzos y preparar estrategias de lucha social, para globalizar la defensa de los derechos humanos de los pueblos en el continente.

González, señaló que el Cambio Climático que afecta a la región, debe ser una bandera de lucha para revertir los estragos en agua, tierra, aire y vida de todos los seres humanos.

“Este es un riesgo construido por la humanidad, por el abuso de los recursos naturales, producto de la actividad industrial de los últimos 150 años y que el modelo económico extractivista global, precisamente, es lo que acelera el conflicto socio ambiental que estamos viviendo. El problema es que los causantes de esta crisis, se siguen beneficiando desde el acaparamiento y abuso de los recursos y con Estados que no actúan en el bienestar de las poblaciones”, dijo.

Pedro Landa, de la organización ERIC, citó cifras preocupantes desde Honduras, en donde veinticinco áreas que han sido declaradas protegidas fueron concesionados para actividades de exploración minera y proyectos de energía eléctrica, que ha generado una fuerte oposición desde el movimiento social.

“Tenemos treinta y dos concesiones mineras y diez proyectos hidroeléctricos, dentro de microcuencas y para nadie es indiferente que este año estamos viviendo el verano más fuerte que hemos experimentado, tanto así que el río Choluteca se ha secado completamente, murió uno de los grandes ríos de Honduras y solo esperamos la lluvia para ver si se recupera así como en otras zonas, esta es una alarma directa a nuestro país. Y todo esto es por los proyectos extractivos en esas zonas donde fluyen todos los manantiales y nacimientos de agua que nutren al país”, expresó Landa.

Landa agregó que se encuentran activas cuarenta y siete concesiones mineras y veinticinco proyectos de generación de energía, están dentro de áreas protegidas y otras similares dentro de microcuencas. Dejando un 65 % del territorio nacional de Honduras entre concesiones mineras o proyectos de generación de energía eléctrica, distribuidas en 194 municipios.

Para Nicaragua, el panorama es similar y la lucha social de su pueblo inició por el incendio en la Reserva Biológica Indio Maíz, un levantamiento juvenil que ha marcado contradicciones con el gobierno, en cuanto a concesiones mineras, leyes de desarrollo económico y libertad de expresión, manifestó Hazzel Torres, Centro Humboldt.

“Se criticó mucho a los jóvenes de no tener conciencia ambiental o política para defender los derechos ciudadanos, pero desde abril de 2018 la juventud nicaragüense es la voz cantante de esta lucha social y están llevando toda la incidencia a nivel nacional e internacional, en la que se suman las organizaciones sociales de Nicaragua, que por muchos años estamos defendiendo a la madre tierra y nuestra labor como defensores de derechos ambientales”, afirmó.

Asimismo, mencionó como el proyecto del canal seco fue descartado, luego de una movilización importante de la ciudadanía, acompañada de la juventud nicaragüense, por las violaciones a las normas ambientales de su país.

“Mantenemos una lucha fuerte contra la minería y la actividad extractiva, el sector minas es único sector vigente en el país, que trabaja bajo un contexto socio político pesado, porque aún sigan concesionando licencias mineras y se crimizalizar toda el accionar de defensa de la población y como el Estado las aprueba, frente a la amenaza a la libre participación”, mencionó.

Bernardo Belloso, presidente de CRIPDES, El Salvador, en su intervención consideró que toda la región centroamericana se encuentra en una situación preocupante, aunque reconoció que en el país, al contar con una Ley de Prohibición de la Minería Metálica y que los últimos gobiernos no han sido opositores al fortalecimiento del movimiento social, falta mucho trabajo para cohesionar a los nuevos gobernantes.

“El Salvador es bastante pequeño, de extensión territorial, pero estamos entre los países de mayor vulnerabilidad a nivel mundial y deteriorados ambientalmente y propenso al impacto del Cambio Climático. Sin duda alguna, todo este contexto de precariedad está ligado a los funcionarios públicos que se eligen por el voto popular. Y en los últimos escenarios de elecciones que hemos tenido en los últimos dos años, desde los concejos municipales y diputaciones los partidos de derecha tienen mayor presencia y esto, por supuesto es un problema para las demandas sociales y populares de la población vulnerable”, opinó Belloso.

Asimismo, sobre el nuevo gobierno del presidente electo Nayib Bukele, con el partido GANA, Belloso calificó de ‘preocupante’, las posturas del mandatario, que generan la percepción de favoritismo hacia el gobierno de los Estados Unidos, que ha jugado un papel injerencista en la historia del país, indicó.

“No vemos a este nuevo gobierno con interés de asumir una agenda ambiental, que el movimiento social ha venido presentando durante mucho tiempo, fueran gobiernos de izquierda o derecha.

No vemos claridad en su plan de gobierno, no vemos coincidencia con nuestras demandas y respuestas a esta problemáticas, por eso el llamado al movimiento social a unificarnos frente a este nuevo gobierno”, concluyó.

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