El tenista salvadoreño llegó hasta octavos de final en dobles de Roland Garros.
Rolando Alvarenga
@Bachiboxx55
Los adjetivos para calificar el desempeño que ha tenido el tenista salvadoreño Marcelo Arévalo, en los últimos meses, parecen acabarse.
El fin de semana, “Chelo”, como se le conoce al tenista cuscatleco, tuvo un desempeño histórico en dobles del prestigioso torneo Roland Garros.
En el torneo parisino, Arévalo hizo dupla con el estadounidense James Cerretani, con quien llegaron hasta octavos de final siendo derrotados por el austríaco Oliver Marach y el croata Mate Pavic.
Eso sí, a pesar que Marach y Pavic partían como favoritos (actualmente se sitúan en los dos primeros lugares del ranking ATP de dobles y vienen de ganar el Abierto de Australia) no la tuvieron fácil ante el salvadoreño y estadounidense.
Fue así que al final, la dupla Marach-Pavic se quedó con la victoria con cartones de 6-3, 3-6 y 6-3 ante una aguerrida dupla Arévalo-Cerretani.
Consagración para “Chelo”
Llegar a octavos de final de Roland Garros significa una especie de consagración y graduación en la élite mundialista para Marcelo Arévalo.
Y no es para menos, gracias a su excelente desempeño “Chelo” puso en alto el nombre y la bandera de El Salvador, en un Torneo de Grand Slam.
“Gracias hermanos salvadoreños por darme todo el apoyo y motivación durante este Roland Garros. Esto me motiva para trabajar más fuerte, para llevar más alegrías a nuestro país y que nuestra bandera siga llegando a todos los rincones del mundo. Doy gracias a Dios por esta gran oportunidad, a mi equipo de trabajo y a mi familia. Si Dios nos lo permite, nos vemos el próximo año aquí”, posteó en su Facebook el mejor tenista de la historia salvadoreña.