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Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
“La presión que Estados Unidos da a El Salvador tiene su intención y no ha podido lograr. El nuevo presidente ha resistido y espero que pueda resistir, porque no tiene razón de ser, ya que la presión no beneficia al desarrollo de El Salvador”, dijo Zhao Bentang Director del Departamento de América Latina y El Caribe de la Cancillería de la República Popular China, ante la pronta llegada de un nuevo embajador del país norteamericano a El Salvador. Y es que este nuevo diplomático ha dejado entrever que luchará por impedir que las relaciones chino–salvadoreñas sigan creciendo.
Ronald Douglas Johnson ex militar e integrante de la CIA ya fue ratificado por el senado estadounidense, para ser el nuevo embajador ante El Salvador. Johnson no tiene fecha aún para asumir su cargo en el país centroamericano, pero ha dejado claro que su intención es presionar al gobierno salvadoreño para dar marcha atrás a las relaciones chino–salvadoreñas, ya que representa un riesgo, de manera económica para los salvadoreños.
Ante esto Bentang reconoce que Estados Unidos ha presionado a los salvadoreños por la apertura de relaciones con China Popular, desde agosto del año pasado, y no niega que esto pueda incrementarse con la llegada del nuevo embajador. No obstante espera que esté gobierno siga soportando la presión y no dar paso a la presión estadounidense.
“Hay futuro en la cooperación de China y El Salvador. Espero que el nuevo embajador deje o reduzca la presión. Nosotros vamos a continuar profundizando las relaciones con El Salvador; no tenemos la intención de infiltrar en la seguridad o confidencialidad de El Salvador. No se impone nada”, agregó.
El funcionario chino que ha participado directamente en la apertura de relaciones diplomáticas con El Salvador, asegura que hay un buen porvenir en las relaciones bilaterales. Principalmente para los pueblos, que son la base de toda negociación y acuerdo bilateral entre los países.
“El futuro será muy brillante”, reafirmó Bentang. Y es que en las últimos meses contrario a lo que se especuló, las relaciones bilaterales se han fortalecido, el gobierno de Bukele ha declarado que no importan los intereses personales de Estados Unidos o de China, sino que está a favor de los intereses del pueblo salvadoreño de quienes velará.
China-Latinoamérica y El Caribe
Por otro lado el funcionario explicó que este es el mejor momento para las relaciones entre República Popular China y América Latina y El Caribe. “Esta es una región de países en vías de desarrollo igual que China. La República Popular China hace mucha importancia a los países que se encuentran en vías de desarrollo”, dijo.
Hasta la fecha veinticuatro países de la región latinoamericana ya tienen relaciones diplomáticas con China Popular.
A partir del 2000 al 2012 la cooperación entre China y la región se profundizó y se amplió. Bentang asegura que en el año 2000 el comercio bilateral entre China y la región era de 20 mil millones de dólares, pero al 2012 subió a 200 mil millones de dólares.
Actualmente el gobierno de Xi Jinping promueven proyectos de gran volumen a favor de los pueblos de América Latina y El Caribe. Estos últimos interesados en proyectos de mayor calidad y tecnología más avanzada, proyectos que benefician al pueblo: “con igualdad, beneficio mutuo, innovación, abierto y beneficio al pueblo.
Esto es muy importante y muy aplaudido por América Latina. Sobre este nuevo concepto la relación bilateral ha entrado en un nuevo horizonte empezando una nueva época”, sostuvo.
Para China, América Latina no es considerada como su patio trasero, sino que basa su relación en beneficio mutuo y ganar–ganar. Estados Unidos ataca pero no puede quitarle el derecho a los países de querer buscar un mejor desarrollo social, basado en el respeto mutuo, no intervención y desarrollo conjunto.
