Pekín/AFP
Ryan Mc Morrow
China y Rusia criticaron con dureza el informe del gobierno de Estados Unidos que les considera potencias hostiles, una muestra según ellos de la «mentalidad de Guerra Fría» y del «carácter imperialista» de la administración de Donald Trump.
En el texto publicado el lunes y que define la visión que tiene Washington del mundo, los dos países aparecen como hostiles y competidores de Washignton.
«China y Rusia desafían el poder de Estados Unidos, su influencia y sus intereses, e intentan erosionar la seguridad y la prosperidad de Estados Unidos», reza el documento.
Poco después Donad Trump reafirmó que Rusia y China son «potencias rivales».
Pero la respuesta no se hizo esperar.
«Instamos a Estados Unidos a que cese de deformar voluntariamente las intenciones estratégicas de China, y que abandone sus conceptos ya superados, como su mentalidad de Guerra fría», indicó este martes Hua Chunying, portavoz del ministerio chino de Exteriores, en un encuentro con la prensa.
En el mismo sentido se expresaron las autoridades rusas, a quién Estados Unidos acusa de interferir en sus asuntos internos.
«El carácter imperialista de ese documento es evidente, tanto como el rechazo a renunciar a un mundo unipolar, un rechazo insistente», declaró a la prensa el portavoz del Kremlin Dmitri Peskov.
El gobierno ruso «no puede aceptar que traten al país como una amenaza a la seguridad de Estados Unidos», agregó Peskov.
Las conclusiones del informe estadounidenses contrastan con las recientes encuentros entre Donald Trump y los presidentes chino Xi Jinping y ruso Vladimir Putin.
El documento acusa a China de querer «suplantar a Estados Unidos» en Asia, de robar información o de querer extender su «sistema autoritario».
«China jamás llevará a cabo su propio desarrollo a expensas de otros países. Al mismo tiempo nunca renunciará a sus derechos e intereses legítimos», replicó el portavoz de Pekín.
En noviembre Donald Trump fue recibido con todos los honores en China para su primera visita oficial, durante que la que elogió a Xi Jinping en varias ocasiones.
Pero ambas potencias están inmersas en una intensa rivalidad comercial. Washington ha tomado medidas aduaneras sin precedentes contra los productos fabricados en China.
A pesar del informe, Trump quiso adoptar el lunes un tono menos agresivo y en su discurso se felicitó de la cooperación entre los servicios de inteligencia rusos y estadounidenses que, según Moscú, sirvieron para frustrar un atentado en San Petersburgo.
«Fueron capaces de detener a terroristas sin ninguna pérdida humana», dijo Trump, asegurando que podrían haber muerto «miles» de personas. «Es así como deben funcionar las cosas», añadió, elogiando la cooperación en estas cuestiones con Putin.
La justicia estadounidense está examinando las relaciones entre Donald Trump y el presidente ruso y el fiscal especial Robert Mueller investiga si hubo injerencias rusas con la campaña del ahora presidente durante las elecciones presidenciales de 2016.
El informe sobre la estrategia de seguridad nacional también considera que el arsenal nuclear ruso es ahora mismo «la mayor amenaza para la existencia de Estados Unidos».
«Sin embargo hay modestos puntos positivos» en el informe estadounidense, reconoció portavoz del Kremlin, entre ellos «la voluntad de cooperar con Rusia en áreas que corresponden a los intereses estadounidenses».