ONU/Xinhua
China se opone a politizar y usar el doble rasero en el tema de los derechos humanos y rechaza cualquier intromisión en los asuntos internos de los Estados utilizando esa cuestión como pretexto, afirmó un alto diplomático chino.
Wu Haitao, vicerrepresentante permanente chino en Naciones Unidas, hizo estos comentarios en su intervención en el debate general del Tercer Comité de la 71ª sesión de la Asamblea General de la ONU, el cual se encarga de los asuntos sociales, humanitarios y de derechos humanos que afectan a los pueblos de todo el mundo.
«Debemos defender el principio de la igualdad», afirmó. «Los intercambios y la cooperación en el terreno de los derechos humanos deben adecuarse estrictamente a los propósitos y principios de la Carta de la ONU y a las normativas fundamentales que gobiernan las relaciones internacionales, respetando la soberanía, la independencia y la integridad territorial de los Estados», dijo.
Señaló que «el diálogo y la cooperación deben conducirse sobre la base de la igualdad, además de buscar un aprendizaje mutuo de forma abierta e inclusiva». «Deberíamos explorar medios efectivos de cooperación en derechos humanos ahondando la confianza mutua».
«Debemos hacer avanzar el desarrollo inclusivo», aseguró Wu, quien subrayó que «el desarrollo es la base para la promoción y la protección de los derechos humanos».
Añadió que «los países desarrollados están obligados a honrar sus compromisos AOD (ayuda oficial al desarrollo) sinceramente».
Wu resaltó que son necesarios esfuerzos para encontrar un equilibrio entre las dos categorías de derechos humanos. «Los derechos económicos, sociales y culturales, y el derecho al desarrollo, por una parte, y los derechos civiles y políticos, por la otra, son interdependientes e igualmente importantes», precisó.
«Todos los tipos de derechos humanos deben promoverse de forma equilibrada y coordinada», destacó Wu, y señaló que «los países desarrollados deben conceder más importancia a la promoción y la protección de los derechos económicos, sociales y culturales, y reconocer el derecho al desarrollo».
Dada la interrelación complicada que existe entre los derechos humanos y los valores, las tradiciones históricas y culturales, así como los sistemas políticos y económicos de los diferentes países, los derechos humanos deben buscarse teniendo en cuenta las condiciones específicas de las naciones y las aspiraciones de sus pueblos, enfatizó.
«China ha encontrado su propio camino de desarrollo de los derechos humanos combinando el principio de la universalidad de los derechos humanos con sus condiciones nacionales, y ha logrado resultados notables», aseguró Wu.
Según agregó, «cumpliremos con nuestras obligaciones en virtud de los tratados sobre los derechos humanos, participaremos plenamente en el trabajo de los mecanismos pertinentes de la ONU, entablaremos diálogos amplios sobre los derechos humanos, los intercambios y la cooperación, y proporcionaremos la asistencia técnica que necesiten otros países en desarrollo».