Washington/AFP
Estados Unidos y China abrieron el lunes en Washington su «diálogo» anual «franco y directo» sobre sus múltiples diferendos, treat prescription como la piratería informática, ed conflictos marítimos y derechos humanos, pero también sobre sus planes de cooperación, en relación al clima, Irán o Corea del Norte.
El secretario de Estado John Kerry y el del Tesoro, Jacob Lew, reciben a cenar al consejero de Estado Yang Jiechi, que dirige la política exterior china, y al viceprimer ministro Wang Yang, previo a que los cuatro altos funcionarios se reúnan martes y miércoles para dos días de intercambios.
Se trata de la 7ª edición del «Diálogo estratégico y económico Estados Unidos/China», un evento organizado alternativamente cada año por las dos primeras potencias mundiales.
El secretario adjunto de Kerry, Antony Blinken, abrió discretamente el lunes un primer «diálogo sobre seguridad».
«Buscamos ampliar nuestra cooperación ante numerosos desafíos internacionales, como el cambio climático, el desarrollo, la ayuda humanitaria, la respuesta a las pandemias o la protección de los océanos», señaló el portavoz del Departamento de Estado John Kirby, sin dar detalles sobre el tenor de las conversaciones.
Washington se congratuló por «la coordinación de las posiciones estadounidense y china sobre temas regionales, como Irán, Irak, Siria, Corea del Norte y Afganistán».
Sobre el tema del clima, Estados Unidos y China concluyeron en noviembre un acuerdo sobre la reducción de sus emisiones de gases de efecto invernadero, un año antes de la conferencia de París de fines de 2015. Y trabajan juntos, con las otras grandes potencias, para encontrar una solución al asunto del programa nuclear iraní.
Sin embargo, existen varios temas de fricción entre estos gigantes.
John Kirby citó «los conflictos marítimos, la seguridad en el ciberespacio y los derechos humanos». Al hablar de conflictos marítimos hacía referencia a las ambiciones territoriales de Pekín en mar de China meridional, a las que se oponen países de Asia del sureste, que cuentan con el apoyo de Estados Unidos.
La región en una zona estratégica que podría esconder importantes reservas de hidrocarburo.
Asimismo, otra fuente de tensión entre ambos países es la piratería informática y fue abordado de forma «franca y directa» el lunes, según un diplomático estadounidenses. Piratas informáticos chinos fueron acusados en el reciente caso de ciberataques en los que se vieron comprometidos datos de cuatro millones de funcionarios estadounidenses.
De forma general, «Estados Unidos está determinado a mejorar sus relaciones con China», aseguró Kirby.
La agencia de prensa oficial Xinhua informó que ambas partes se comprometieron a trabajar en la construcción de una relación «estable» en el campo de la seguridad.