Rivoli, Italia/Prensa Latina
El ciclista británico Mark Cavendish (Quick Step Alpha Vinyl) conquistó el miércoles la edición 103 de la clásica Milán-Turín, disputada sobre 197 kilómetros entre la localidad de Magenta y aquí.
Cavendish, de 36 años, apeló a un poderoso esprint para imponerse con autoridad al marcar un tiempo de 4:31.22 horas y conseguir su tercera victoria de la temporada.
El pedalista del Reino Unido mostró su poderío en la recta final para batir al francés Nacer Bouhanni (Arke Samsic), segundo, y al noruego del Intermarche Alexander Kristoff, tercero.
En un esprint largo, bien lanzado por el Quick Step para su jefe de filas, Cavendish no defraudó para lograr su victoria profesional número 159, con el honor de ser el vencedor más veterano en la historia de la Milán-Turín, la clásica más antigua del ciclismo, nacida en 1876.
Al inicio tres pedalistas, el italiano Martin Marcellusi (Bardiani), el colombiano Juan Diego Alba (Drone Hopper) y el portugués Daniel Viegas (Eolo Kometa) se escaparon del pelotón y lideraron la carrera por 175 kilómetros hasta su neutralización a 20 km de la sentencia.
El irlandés Ben Healy trató de sorprender con una fuga, primero salió con su compañero del EF Education el italiano Alberto Bettiol, pero luego se quedó solo ante el mundo.
Healy, tercero en el Giro de Italia sub-23, llegó a tomar diferencia de 20 segundos, pero el sueño acabó a cuatro kilómetros del final, cuando la maquinaria del Quick Step terminó con cualquier aventura.
El grupo, con el Quick Step y el Total Energies del eslovaco Peter Sagan en cabeza, asomaron a mil metros de la última pancarta, momento en que el lanzador de Cavendish, el danés Michael Morkov, atacó para remolcar al británico, quien aprovechó bien la maniobra del nórdico para conseguir la victoria.