El que se cierren estos espacios hará más difícil la situación, se tendrá mayor incremento de casos de muchas enfermedades, por no tener una atención primaria adecuada.
Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
El cierre de centros de salud como los ECOS Familiares, en el Sistema Nacional de Salud, y las Clínicas Comunales del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), es un impacto directo a las poblaciones mayormente vulnerables económica y socialmente, consideró el presidente del Colegio Médico, Iván Ernesto Solano, al señalar que habrá un vacío en el área de diagnóstico, prevención y tratamiento oportuno de enfermedades infecciosas.
“Definitivamente esto vendría a causar más deterioro en la atención en salud en el Sistema Nacional de Salud, se diría que estamos dando prioridad a la atención terciaria y no a la prevención que da la atención primaria», indicó el galeno.
Un Sistema Nacional de Salud adecuado es aquel que le da mayor atención y recursos a la prevención, manifestó Solano, pero en El Salvador se está haciendo lo contrario.
El Primer Nivel de Salud está referido a proporcionar servicios de asistencia sanitaria a una demanda programada o urgente en consulta domiciliaria de la población que esté enferma.
Mientras, el Tercer Nivel, es atención médica especializada que incluye diagnósticos, procedimientos médicos y tratamientos avanzados que sólo se pueden brindar en hospitales que cuentan con este tipo de equipos y tecnología, dijo.
El Foro Nacional de Salud (FNS) denunció la semana pasada el cierre de 29 instalaciones de los Equipos Comunitarios de Salud (ECOS Familiares) que daba acceso a servicios médicos en zonas rurales, como comunidades urbanas periféricas, por lo que han dejando sin acceso a la población al derecho humano a la salud.
“Los colegas en los equipos locales de salud integrados a nivel de las zonas geográficas de influencia que les toca trabajar -pues ellos -, conocen a su población y llevan un mensaje de prevención importante a nivel de la población que les toca atender”, señaló Solano, al respaldar la labor de los ecos familiares, que fueron concebidos bajo la administración de la doctora María Isabel Rodríguez, al frente del Ministerio de Salud, como el fortalecimiento del primer nivel de salud.
“Y el que se cierren estos espacios hará más difícil la situación, se tendrá mayor incremento de casos de muchas enfermedades, por no tener una atención primaria adecuada”, expresó Solano.
Durante los dos gobiernos del FMLN se crearon 400 ECOS familiares y Especializados de Salud, como parte de lo que la doctora Rodríguez denominó la principal reforma de salud en El Salvador. Esta reforma fue reconocida por organismos internacionales de salud, pues estaban encaminados también al cumplimiento de los Objetivos de la Agenda 2030, en el área de la salud de la población más vulnerable.
Infecciones Manos, Pies y Boca sin datos epidemiológicos
El presidente del Colegio Médico también comentó la falta de datos sobre la propagación de la infección de Manos, Pies y Boca, que ha ido en alza de casos. Esta es una enfermedad que no está dentro del reporte obligatorio, por lo tanto, las autoridades de salud no registran el comportamiento de esta infección, como lo hacen con el dengue que lleva un monitoreo continuo.
“Lo que sí hemos visto y la población no nos deja mentir, es que hay un repunte importante desde principios de año, tanto es así que ha afectado a mil escuelas a escala nacional”, afirmó.
“Y lo decimos por reportes periodísticos, reportes brindados por el Ministerio de Educación y el presidente de Colegios Privados. En ese sentido el impacto que ha tenido esta enfermedad, pero no podemos mencionar el número por falta de información sobre la cantidad de casos, al ser una enfermedad sin reporte obligatorio”, concluyó Solano.
Se ha conocido, que el ministerio de Salud ha dado instrucciones a los médicos del sistema a no dar información, dado que la enfermedad no es “mortal”. Sin embargo, ha mando a los médicos y otro personal auxiliar a las escuelas a dar charlas de cómo detectar la enfermedad y las medidas a tomar. Estas medidas son fundamentalmente evitar que los niños y niñas afectadas con el virus no asistan a los centros escolares durante cinco o siete días.