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Yanuario Gómez
@DiarioCoLatino
Coreando consignas como ‘’La Constituyente va’’, ‘’que viva Venezuela’’ y ‘’arriba Maduro’’ mientras ondeaban banderas con la leyenda ‘’Trump… Venezuela se respeta”, cerca de cien miembros de la Coordinadora Intergremial Rafael Aguiñaga Carranza (CIRAC) se concentraron en el redondel José Martí para brindar su total apoyo al país sudamericano y al gobierno progresista dirigido por el presidente Nicolás Maduro.
Para José Ramírez, representante del sector profesional de CIRAC, los ataques hacia el pueblo venezolano que mantiene la derecha de ese país, en complicidad con el gobierno de Donald Trump, forma parte de una agenda bien establecida que tiene como finalidad el derrocamiento del presidente Nicolás Maduro y el regreso de la oposición al control del Estado. ‘’La guerra mediática y económica que el imperialismo norteamericano desarrolla junto a la derecha de Venezuela es parte de un boicot hacia Maduro, en el que participan los medios de comunicación controlados por la oposición haciendo un periodismo de guerra, es decir, que una victoria pequeña de la oligarquía de ese país la hacen parecer grande y minimizan los aciertos del Ejecutivo’’, mencionó Ramírez. Según CIRAC, con el surgimiento de los gobiernos democráticos populares en América Latina, en las últimas dos décadas, el gobierno de Estados Unidos lanzó una escalada intervencionista con una nueva modalidad para derrocar gobiernos legítimamente electos por el pueblo, que se basa en dos factores: la judicialización de la política y el boicot económico total hacia gobiernos que no son afines a sus intereses. En el caso de la judicialización de la política, según la Coordinadora Intergremial, combina acciones aparentemente legales con una amplia cobertura mediática para impresionar y confundir al pueblo. Luego ejecutan el segundo componente que consiste en esconder productos básicos, boicotear su ingreso y promover su salida para crear vacíos monetarios y escaces de alimentos para desestabilizar al gobierno.
Para Ramírez esta estrategia también se aplica en nuestro país por parte de la derecha nacional, ya que al bloquear financiamiento para proyectos en beneficio de la población, generar desempleo y usar a los medios para propagar la idea de que el gobierno no sabe administrar las finanzas públicas muestran su intención de desestabilizarlo. Así pretenden regresar al Ejecutivo y frenar los avances en lo social que se han alcanzado a la fecha.
