Damasco/AFP
Estados Unidos y una alianza de países árabes lanzaron el martes bombardeos aéreos y misiles Tomahawk contra posiciones del grupo Estado Islámico (EI) en Siria, viagra here abriendo un nuevo frente de combate contra esa organización yihadista.
Los bombardeos causaron la muerte de al menos 120 yihadistas, 70 del Estados Islámico y 50 de Al Qaida, y 300 heridos, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Por su parte, Estados Unidos también atacó posiciones del grupo Jorasan, afiliado a Al Nosra, la rama siria de Al Qaida, en el oeste de la provincia de Alepo, indicó el departamento de Defensa estadounidense.
Los bombardeos provocaron la huida de civiles, indicó el OSDH.
«Los civiles que viven cerca de las posiciones de EI en Siria huyeron», dijo a la AFP Rami Abdel Rahmane, director del OSDH.
Se trata de la primera intervención de Estados Unidos y sus aliados desde marzo de 2011 en Siria, donde el EI, combatido por el gobierno y una parte de los rebeldes, ocupa territorios fronterizos con Irak y Turquía.
Cuatro países árabes del Golfo -Bahréin, Catar, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos- y Jordania participaron en los bombardeos, confirmó una fuente del Pentágono.
El gobierno del presidente sirio Bashar al Asad dijo por su parte que Estados Unidos le había comunicado el lunes, a través de Irak, su intención de atacar a los yihadistas en su territorio y reafirmó que apoyaba «cualquier esfuerzo internacional» para combatir a los yihadistas.
«Siria respalda cualquier esfuerzo internacional para combatir el terrorismo» pero «insistiendo en el respeto de la soberanía nacional y en conformidad con la legislación internacional», informó el ministerio en un comunicado.
Estados Unidos considera ilegítimo al gobierno sirio y apoya a las fuerzas moderadas de la rebelión.
En el ataque participaron aviones caza, drones y bombarderos, mientras que navíos estadounidenses dispararon desde las aguas internacionales del Mar Rojo y el Golfo 47 misiles Tomahawk, indicó el Pentágono.
Los bombardeso apuntaron a sitios de entrenamiento, centro de comando, bases, depósitos y vehículos armados en las regiones de Raqa (norte), epicentro del poder de EI, de Deir Ezzor (noreste), de Hassaka (noreste) y Bukamal (norte), según la misma fuente.
La oposición moderada siria apoyó los ataques.
«Esta noche, la comunidad internacional se ha unido a nuestra lucha contra el Estado Islámico en Irak y Levante en Siria», dijo el presidente de la Coalición Nacional Siria (CNS), Hadi al Bahra, mencionando al grupo con su nombre anterior.
Los bombardeos tuvieron lugar en momentos en que EI desarrolla una ofensiva para apoderarse de la ciudad estratégica de Ain al Arab (Kobane, en kurdo), en la región kurda de Siria.
En los últimos días el EI tomó el control de 60 localidades cerca de esa ciudad, provocando el éxodo de más de 130.000 kurdos sirios hacia Turquía, según Ankara.
En otro frente del conflicto sirio, el ejército israelí anunció que había derribado el martes un avión sirio, al parecer un MIG-21 que se había acercado a la línea de demarcación en la meseta del Golán.
El ataque de posiciones del EI en Siria constituye un nuevo hito de la guerra de Estados Unidos contra esa organización, que comenzó el 8 de agosto pasado, cuando tuvieron lugar los primeros bombardeos en Irak.
La decisión de atacar en territorio sirio fue adoptada por el jefe del Comando Central de Estados Unidos, el general Lloyd Austin, «en virtud de la autorización que le concedió el comandante en jefe», el presidente Barack Obama, señaló Kirby.
En la víspera de los ataques, el EI había lanzado un llamado a los musulmanes a matar «sea como sea» a ciudadanos de los países que integran la coalición internacional contra el yihadismo, en particular Estados Unidos y Francia.
Pocas horas después de este anuncio, un grupo yihadista argelino vinculado al EI reivindicó en un vídeo el secuestro de un francés en Argelia y amenazó con matarlo si Francia continúa participando en los ataques en Irak.
El martes, el primer ministro francés Manuel Valls, declaró que Francia no mantendrá «ninguna discusión, ninguna negociación» con los autores del secuestro.
Francia es hasta ahora el único país que se había unido a Estados Unidos en sus operaciones contra los yihadistas en Irak.