Alma Vilches
@AlmaCoLatino
Con mucha fe y devoción cientos de feligreses católicos, así como turistas nacionales y extranjeros participaron de la procesión de las Flores y las Palmas, la cual lleva más de 41 años celebrándose. La procesión recorrió el casco urbano de Panchimalco culminando en la a iglesia de la Santa Cruz de Roma.
Este año el Ministerio de Cultura reconoció a las Cofradías de Flores y las Palmas de Panchimalco como patrimonio cultural inmaterial salvadoreño, por su alto valor tradicional, simbólico y social, para su salvaguardia y goce de la comunidad, nación y humanidad.
Este reconocimiento también fue otorgado al Tata de las cofradías, Don Teofilo, quien es un elemento clave para seguir manteniendo viva esta tradición que se celebra desde hace más de 41 años en el municipio y se ha transmitido de generación en generación.
Esta declaratoria marca un precedente en la historia de Panchimalco, convierte a esta expresión cultural como algo que seguirá siendo transmitida.
Previo a la procesión en las cofradías de la casa del mayordomo y de la capitana, lugareños y turistas se reunieron para la colecta de las flores de ensartar y decorar las coloridas palmas, que acompañaron las imágenes de la Virgen de Concepción y de El Rosario, con música de banda y quema de cohetes por las principales calles del municipio.
A cada visitante que llega a la cofradía se le da pan dulce y un huacal de horchata, tamales, chocolate, chicha, arroz aguado con cerdo y lo que los cofrades hayan logrado conseguir durante el año de preparación para la festividad de anticipación.
Las fiestas de Panchimalco en el mes de mayo son la fusión del Día de la Cruz y las celebraciones a la Virgen María, que coinciden con el calendario agrícola del inicio de las lluvias en el país. Con la procesión de Las Palmas y Flores en honor a la madre de Jesús, los lugareños también piden a Dios por una abundante cosecha.
Antes de 1980, se llevaban a cabo las tardes de mayo, cada persona hacía una o dos palmas y todas las tardes salían en procesión, fue entonces cuando un grupo de jóvenes tuvo la iniciativa de juntar todas esas palmas el primer domingo de mayo e instituir una de las fiestas más conocidas a nivel nacional, como es el Festival de las Flores y las Palmas.