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Redacción Nacionales
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La alcaldía de San Salvador presentó el “Plan Pólvora 2023” con el objetivo de brindar espacios de compra segura durante la Navidad y fin de año, bajo condiciones óptimas tanto legales como municipales.
La comuna informó que serán 175 puestos de ventas de pólvora autorizados, que iniciarán oficialmente la temporada de venta este 11 de diciembre; donde se harán constantes verificaciones para constatar que dueños y empleados posean los permisos correspondientes.
En la capital han habilitado ocho puntos de ventas en los seis distritos, que funcionarán desde el 11 de diciembre de este año hasta el 3 de enero de 2024; entre ellos está, Redondel Baden Powell, calle Motocross, costado poniente de la 11 Avenida Norte, calle Ramon Belloso, Redonde Masferrer, calle a Huizúcar, barrio Santa Anita, frente al Centro Escolar República del Ecuador y el parque Centenario, que reúne la mayor cantidad de puestos de pirotécnicos.
Dentro del Plan Pólvora 2023 se incluyen inspecciones para verificar las rutas de evacuación, insumos de emergencia como depósitos con arena y extintor de polvo químico seco y que las condiciones sean las más seguras.
William Hernández, director de Protección Civil Municipal, explicó que se han capacitado a los comerciantes en la manipulación, almacenamiento, traslado y venta de los productos pirotécnicos, así como en la prevención de emergencias y manejo de extintores, para que la temporada de venta sea de forma ordenada, atendiendo las medidas y requerimientos de protección y seguridad para los vendedores y la población en general.
“Monitorearemos los puntos de ventas, articulando esfuerzos para garantizar la seguridad de los comerciantes y consumidores, además, las torres del Sistema de Videovigilancia Sívar Seguro serán desplegadas por los puntos de venta más grandes y las cámaras mantendrán constante monitoreo para garantizar la seguridad y evitar posibles situaciones que pongan en riesgo a vendedores y compradores”, sostuvo.
Las autoridades de la alcaldía recalcaron que prevén inspecciones periódicas en los puestos de productos pirotécnicos, para verificar el cumplimiento de las medidas de seguridad, sin embargo, es responsabilidad de cada persona el buen manejo de la pólvora.
Como parte de dicho plan se llevó a cabo en el parque Centenario, un simulacro de incendio estructural que tuvo múltiples víctimas con lesiones graves y puestos de ventas afectados, con el propósito de demostrar el trabajo en equipo entre las dependencias del gobierno y cuerpos de socorro.
