@ManahenGza
La selección salvadoreña sub 23 o preolímpica inició el camino rumbo a los Juegos Olímpicos Río 2016, generic ayer, bajo la supervisión de Albert Roca, técnico de la selecta mayor, pero que funge de manera interina como estratega de la selección juvenil. En el primer día de trabajo, Roca contó con la presencia de 24 jugadores: 23 de 26 convocados y un jugador estadounidense-salvadoreño que busca un lugar en el combinado salvadoreño.
Los únicos ausentes en la primera práctica de la azul juvenil fueron Olivier Ayala y Bryan Pérez, por problemas físicos, mientras que César Flores no estuvo por estar de viaje con Firpo.
Con los que sí dijeron presente, Roca y su auxiliar, Carles Cuadrat, trabajaron a doble turno en las instalaciones de la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT), en donde tienen previsto laborar hasta mañana cuando finalice el microciclo y los jugadores regresen a sus equipos.
Por la mañana, Roca y Cuadrat combinaron el trabajo físico y táctico con los jugadores con la idea de ponerlos a tono. El único que se mantuvo al margen en el primer día de trabajo fue Bryan Tamacas que, a pesar de tener un mes de incapacidad por fisura en el 5to metatarsiano del pie en izquierdo, fue convocado a la selección. “Para mí es una motivación cada vez que me llaman a selección porque eso quiere decir que estoy haciendo bien las cosas. Ahora ,cómo grupo, estamos comprometidos a dar lo mejor porque ya se viene el eliminatorio de la UNCAF que sabemos que no será fácil”, expresó Juan Barahona.
Y las palabras de Barahona toman fuerza debido a que la selecta Sub 23 afronta la eliminatoria de la UNCAF del 11 al 15 de agosto en Panamá, enfrentando a los anfitriones, costa Rica y Nicaragua, quienes conforman el grupo “A”.
Por ello, los jugadores se han comprometido en dar lo mejor y así llegar en buen nivel a la competencia de la UNCAF y conseguir uno de los cuatro boletos al Preolímpico de la CONCACAF. “Sabemos que parte de los que estamos acá logramos clasificar al Mundial Turquía 2013 y eso nos ayuda a confiar en que podemos llegar lejos y conseguir la clasificación a Río 2016; pero antes debemos superar dos eliminatorias que no serán fáciles”, comentó Diego Coca.
Por un lugar en la selecta
Roberto Rivera, centro delantero, nacido en Estados Unidos, pero de padre salvadoreño, se sumó ayer al trabajo de la selección sub 23 o preolímpica con el objetivo de ganarse un lugar en el grupo.
Rivera, quien se define como un delantero que utiliza bien su cuerpo en el área, trabajó con todo el plantel bajo las órdenes de Albert Roca, técnico interino de la selección juvenil.
Tras la práctica, Rivera se reunió unos minutos con el entrenador español y luego se retiró al albergue del futbolista sin antes atender a los medios. De entrada, el jugador estadounidense-salvadoreño explicó que vino al país por sus propios medios con la esperanza de quedarse en la selecta juvenil.
“Le doy gracias a Dios por estar acá (en El Salvador) de nuevo, también al profesor (Albert) Roca, hablé con él, y ha estado en comunicación con los directivos de acá y espero poder quedarme en la selección”, expresó Rivera, quien dijo que se enteró de la convocatoria por los medios de comunicación y por eso viajó a territorio salvadoreño.