Gloria Silvia Orellana
@SilviaCoLatino
La comisionada de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Margarette May Macaulay, abogada de origen jamaiquino, reiteró su agradecimiento a la invitación para visitar al país y abordar el complejo tema de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres en América Latina.
“Tenemos el mandato de tutelar los derechos humanos, erradicando la violencia contra las mujeres y las niñas en Latinoamérica y el Caribe. Canadá ha dado el financiamiento y es el primer evento que estamos llevando a cabo, en El Salvador. Y la visita es clave, para que la CIDH se reúna con las autoridades públicas, así como con la sociedad civil”, afirmó.
Para la funcionaria de la CIDH para lograr un éxito de un Estado democrático, es necesario contar con el pleno goce de los derechos humanos de las mujeres y así contribuir, a una sociedad más inclusiva y progresiva. “La CIDH es el ente autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y tiene el mandato de defender los derechos de todos los individuos, porque todos y todas tenemos derechos sexuales y reproductivos, incluyendo a aquellos con discapacidades, que parece que casi siempre se nos olvida mencionarlos y que están arraigadas en una constelación de muchos derechos humanos fundamentales, garantías e instrumentos de derechos humanos que se han venido adoptando entre las convenciones más recientes”, argumentó.
La presentación de casos emblemáticos como Beatriz, por parte de Angélica Rivas, de Agrupación Ciudadana para la Despenalización del Aborto, demostró la injusticia que se cometió con una mujer con una enfermedad tan compleja como el lupus eritematoso, y que el Estado le había fallado para salvar su vida.
La iniciativa busca que se respeten los derechos de las mujeres para defender su derecho al aborto por las causales de riesgo para la vida de las mujeres por un embarazo de alto riesgo, por inviabilidad de la vida del feto extrauterina o por violación sexual.