Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
Ante un año más de prórroga para que unidades del transporte colectivo que sobrepasen los veinte años de fabricación sigan circulando en las calles de El Salvador, sus ciudadanos ven con muy malos ojos que estas acciones se hayan tomado, porque aseguran que el servicio del transporte público es deficiente y en mucho de los casos muy inseguro.
“La mayoría (de los autobuses) no sirven o sea son pura lata vieja”, es el relato de una salvadoreña que usa a diario el transporte colectivo, ya que, en muchos de los casos, los empresarios no suelen darle un mantenimiento a la unidad.
La salvadoreña criticó el actuar de los legisladores ya que “como ellos no andan en bus, les da igual que sigan funcionado cinco o diez años más, pero los que andamos en bus, somos los que andamos rompiendo los pantalones en las latas viejas”, relató María Fuentes.
Otro relato de un salvadoreño frustrado con el servicio del transporte público es Santos Flores de 60 años, ya que él asegura que los motoristas a pesar de que cobran $0.35 para un supuesto mejor servicio, en algunos de los casos conducen como “si llevaran animales, como si fuesen ganadero”.
Otra de las situaciones que incomodan es que las unidades que cobran $0.20, “los asientos se andan desarmando” y los motoristas conducen muy arriesgadamente, estos “no se concientizan a que son personas a los que llevan y nos pueden hacer daño, al momento de bajarnos, subirnos o incluso al momento del viaje”, opinó Flores.
Y ante la prórroga que aprobó la Asamblea, Flores dijo que esas decisiones “son amañadas”, de igual espera que con la nueva bancada (Nuevas Ideas), se puedan respetar y mejorar el servicio que brinda el servicio del transporte público.
Nelson Hernández, de igual forma, comentó que no está de acuerdo que se prorrogase por un año más la circulación porque incluso “las unidades tienen hasta hoyos en el piso, a uno le da miedo subirse a esos microbuses y buses”.
Los salvadoreños coincidieron que estas disposiciones transitorias fue un grave error de los parlamentarios, pues con la circulación de los buses con mayor antigüedad, genera un mal servicio, genera tráfico, e inclusive accidentes. Por tanto, todos los entrevistados ven con buenos ojos que el Presidente de la República vete la referida cuestión; sin embargo, el mandatario no se ha pronunciado aún al respecto.