Diario Co Latino 134 años comprometido con usted
Artículos relacionados
@AlmaCoLatino
Eduardo Sancho, no rx conocido en el conflicto armado como Fermán Cienfuegos, store fue uno de los cinco miembros de la Comandancia General del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) que participó en el primer diálogo por La Paz celebrado el 15 de octubre de 1984, recipe en La Palma, Chalatenango.
Sancho explicó que en este primer acercamiento participó la delegación del Gobierno integrada por el presidente de la República, José Napoleón Duarte, Julio Adolfo Rey Prendes, el Chachi Guerrero y el general Eugenio Vides Casanova.
Mientras que, la delegación de la guerrilla estuvo conformada por Facundo Guardado, Fermán Cienfuegos, Nidia Díaz, Lucio Rivera, Guillermo Manuel Ungo y Rubén Zamora ; como moderador participó monseñor Arturo Rivera y Damas, Arzobispo de San Salvador y Gregorio Rosa Chávez, obispo auxiliar.
“Este fue un paso muy importante en la estrategia de diálogo, mediación y negociación de la guerrilla, porque el gobierno legalmente elegido con esa iniciativa reconocía a la contra parte, como fuerza deliberante. El hecho político es que el gobierno de José Napoleón Duarte reconoce a la contraparte, y esa es la importancia del diálogo”, señaló Sancho.
A la vez, indicó que en esta primera reunión se discutieron problemas puntuales como libertades democráticas y reivindicaciones de orden democrático, más que negociar otros aspectos, sin llegar a acuerdos firmes, con el único logro de constituirse en un acercamiento político.
Lo importante de este primer diálogo de la Paz es que abre al mundo la existencia de una fuerza guerrillera que dialoga y que por primera sale al público. Mientras que, internamente se logra que la Iglesia Católica pueda ser mediadora e intermediara en otras actividades como el intercambio de prisioneros.
Con el primer diálogo por la Paz se consolidó las fuerzas intermediaras, ya que se concedió a los cuerpos de socorro y organismos humanitario que implementaran jornadas de salud en diferentes cantones y caseríos.
“A partir de ese momento la vida de las personas que caían en combate se respeta, si era presa por la policía o la guardia se seguían los procedimientos de detención, no era asesinada o desaparecida, según las estadísticas empiezan a desaparecer las masacres y ajusticiamientos de los líderes. Hubo un cambio en la situación de los derechos humanos”, consideró el ex comandante Cienfuegos, quien fuera el máximo líder de la Resistencia Nacional (RN).
A partir de esa fecha se suprimen los escuadrones de la muerte, el ejército continuó haciendo bombardeos indiscriminadamente cerca de la población, pero disminuyó la barbarie registradas en las masacres como la del Sumpul, El Mozote y Copapayo, dice Sancho.
El presidente Duarte si deseaba y tenía voluntad para el diálogo y que se terminara la guerra, “es un acto muy audaz del gobierno, a pesar de que tenía en contra a todo”, reiteró.
Asimismo, recordó que en ese momento se demandó no tomar represalías contra los familiares de los miembros de la guerrilla, ya que de lo contrario ellos tomarían las mismas medidas con los familiares de quienes formaban el ejército.
“A nivel internacional eso tuvo una gran trascendencia, porque la presión internacional sobre el diálogo para las dos partes era igualitario, antes del 15 de octubre del diálogo de la Palma la presión sobre dialogar era solo contra el gobierno, y se abrió el debate interno de la solución política”, agregó.
Desde ese momento, a criterio de Sancho, se creó paralelamente a la guerra, la solución política y fue comprometiendo a las fuerzas guerrilleras a acordar algunas treguas para que la población recibiera ayuda humanitaria y servicios de salud.
Las primeras negociaciones entre gobierno y guerrilla fueron meros acercamientos al diálogo, sin obtener verdaderos acuerdos que derivasen en el fin del conflicto.
El ex comandante de la guerrilla y disidente del FMLN, recordó la travesía que le tocó vivir para llegar al lugar del primer diálogo de la Paz, pues habían recibido información que el ejército preparaba una emboscada con el objetivo de impedirle llegar al municipio de La Palma, sin embargo, por varios días recorrió caminos montañosos y atajos para no ser identificado por las fuerzas armadas.
Posterior a esta primera reunión, se dio otra un mes después en Ayagualo, La Libertad, el 30 de noviembre de 1984, una segunda reunión donde se estableció la disponibilidad al diálogo entre las partes y el compromiso de continuar negociando.
