Miguel Ángel Dueñas Góchez*
La hipersexualización es una referencia utilizada en los últimos años, para señalar la representación de un niño o niña como una especie de adulto sexual en miniatura, ya sea a través de vestimenta o actitudes que incidan en esa imagen. La hipersexualización podría considerarse como una forma de violencia de género, pues fomenta los estereotipos, en los que se refuerza la imagen de la mujer como objeto sexual; además pudiera conllevar a problemas de salud física y mental como la anorexia, bulimia, que en extremo podría fomentar la explotación laboral, sexual y la trata de niñas, niños y adolescentes (tomado del Pronunciamiento hecho por el Comité Local de Derechos de la Niñez y la Adolescencia de Nejapa –CLD- en coordinación con el Consejo Nacional de la Niñez y la Adolescencia –CONNA- respecto al concurso “Miss Chiquitita 2019”).
Al respecto la Ley Especial Integral para una Vida Libre de Violencia para las Mujeres (LEIV), regula en el artículo 9 literal g) lo relativo a la violencia simbólica, definiendo textualmente la misma de la siguiente manera: “Son mensajes, valores, iconos o signos que transmiten y reproducen relaciones de dominación, desigualdad y discriminación en las relaciones sociales, que se establecen entre las personas y naturalizan la subordinación de la mujer en la sociedad”.
Consecuente con la normativa antes relacionada se colige que al exponer a las niñas y adolescentes en espectáculos como “Mis Chiquitita”, vulneran sus derechos a la integridad física, psicológica, moral y sexual, incurriendo además en una forma de violencia simbólica contra la mujer, al legitimar y reproducir patrones, costumbres, tradiciones, prejuicios, roles y estereotipos sexistas basados en exaltar la superioridad y sexualización del cuerpo de la mujer en cualquier ciclo de la vida, en el particular hipersexualizando a las niñas y adolescentes.
Si bien se observa el esmero en la confección de trajes con material reciclable, preocupa que en la promoción del concurso se utilice la imagen hipersexualizada y adultizada de una niña o adolescente, exponiéndoles a depredadores sexuales y pedófilos, rompiendo además con el desarrollo evolutivo de la infancia y adolescencia.
*Licdo. en Relaciones Internacionales.