AFP
Canadá está «consternado»
Canadá está «consternado» por la política estadounidense de separar a los niños de sus padres cuando éstos cruzan ilegalmente la frontera, advirtiendo que Estados Unidos podría perder su estatus de «refugio seguro».
«Creo que todos los canadienses estamos consternados por las imágenes que vienen de Estados Unidos. Las vidas de estos niños son muy valiosas y su seguridad y bienestar tiene que ser lo más importante para nosotros», dijo en el parlamento el ministro canadiense de Inmigración, Ahmed Hussen.
Agregó que Ottawa está «siguiendo la política doméstica de asilo estadounidense para asegurarse de que los cambios en la misma continúen cumpliendo con los requisitos que hacen que Canadá clasifique a su vecino como un país seguro.
El gobierno de Estados Unidos reveló el pasado viernes que la nueva política de tolerancia cero en la frontera con México condujo desde mediados de abril a que más de 2.000 niños fueran separados de sus padres, arrestados por estar ilegalmente en Estados Unidos.
México condena «cruel e inhumana» separación
México calificó omo «cruel e inhumana» la ley estadounidense de ‘tolerancia cero’ que está separando a miles de niños de sus padres inmigrantes que cruzan ilegalmente la frontera común hacia Estados Unidos, abriendo una nueva grieta en la relación con Washington bajo la administración de Donald Trump.
«Quiero a nombre del gobierno y del pueblo de México expresar nuestra más categórica y enérgica condena a una política cruel e inhumana», dijo el canciller mexicano Luis Videgaray, en una conferencia de prensa en Ciudad de México.
«No podemos permanecer ni permaneceremos indiferentes» ante esta situación, recalcó Videgaray, al hacer «un llamado al gobierno de Estados Unidos, en el más alto nivel, para que reconsideren esta política y se dé prioridad al bienestar y derechos de niños y niñas con independencia de su nacionalidad y situación migratoria».
El canciller precisó que «menos de 25 casos» son de nacionalidad mexicana y están siendo atendidos a través de su red consular, mientras que la inmensa mayoría proceden de Honduras, Guatemala y El Salvador, según los datos del gobierno estadounidense.
Guatemala: Estados Unidos viola derechos
El gobierno de Guatemala acusó a Estados Unidos de violar los derechos humanos de los migrantes con su política de «tolerancia cero», que separa a los grupos familiares sin papeles que llegan a la frontera estadounidense.
Guatemala «lamenta, condena y rechaza la política migratoria impulsada por el gobierno de Estados Unidos, por considerar que viola los derechos humanos y destruye la unidad familiar», señaló la cancillería guatemalteca en un comunicado.
El ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala también pidió al gobierno del presidente Donald Trump «reconsiderar» sus políticas migratorias y «buscar acciones que garanticen sus objetivos sin atropellar los derechos de los migrantes ni la unidad familiar».
El Salvador rechaza separación de familias
El gobierno de El Salvador expresó su preocupación por la aplicación de la política migratoria de «tolerancia cero» en Estados Unidos, que separa a los grupos familiares que llegan a la frontera del país norteamericano.
Estas medidas «están afectando principalmente a niños, niñas y adolescentes migrantes, al ser apartados de sus padres o familiares adultos, exponiéndoles a condiciones sumamente adversas, que seguramente tendrán consecuencias en su salud física y desarrollo psicosocial a largo plazo», consignó la cancillería en un comunicado.».
Ante la «difícil» situación, el gobierno salvadoreño «hace un vehemente llamado a las autoridades del gobierno de Estados Unidos a no continuar con la separación de las familias y que se actúe teniendo como centro el interés superior» de los niños, indistintamente de la condición migratoria de sus padres o familiares.
La separación de los niños de sus padres «conllevan a una violación de los derechos humanos, así como a un aumento de la vulnerabilidad», insistió.
Defensorías latinoamericanas piden no separar familias
Las defensorías de México, Colombia, Ecuador, Honduras y Guatemala pidieron de manera conjunta a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que interceda para que Estados Unidos deje de separar a miles de niños de sus padres por haber cruzado la frontera sin documentos.
Los cinco países latinoamericanos solicitaron a la CIDH medidas cautelares a fin de que Estados Unidos «interrumpa la práctica de separar a los niños, niñas y adolescentes migrantes de sus familias, y adopte todas las medidas necesarias para proteger sus derechos», según un comunicado difundido este martes.
Esta postura «es inhumana y representa un total desprecio por los derechos de las niñas, niños y adolescentes migrantes», repudiaron los cinco países latinoamericanos, al considerar que «resulta especialmente peligroso que esta medida está siendo tomada como un mecanismo para disuadir a las personas de migrar, enfrentándoles al peligro de ser separados de sus hijos».