San Salvador/Prensa Latina
Aplausos y vítores confirmaron la excelencia artística del Ballet de Camagüey (Cuba) durante su única presentación en esta capital en un recorrido por clásicos de las tablas.
El capitalino Teatro Presidente con un aforo de mil 500 butacas estuvo colmado, recientemente, de entusiastas admiradores de obras como El Lago de los Cisnes, Cascanueces, Las Sílfides, Coppelia o Giselle, donde no faltaron fragmentos de los ballets Don Quijote y El Corsario, así como obras premiadas internacionalmente, como Muñecos, Peregrinos y Majísimo.
Casi sin descansar de una presentación el miércoles en la noche en Guatemala, la primera parada de una gira que incluye Panamá y cierra en Honduras, los integrantes de la compañía que dirige la maestra Regina Balaguer, se entregaron en cuerpo y alma para dejar una huella imperecedera en un público conocedor que disfrutó de cada una de las variadas ofertas.
“Prepárate para vivir una experiencia única con el Ballet de Camagüey, donde la excelencia artística se encuentra con el esplendor de su elenco”, la premonición de la invitación a esta puesta en escena que anunció un momento de brillo y esplendor de la danza.
Fue un regalo retribuido por fuertes aplausos y que no defraudó a los asistentes. Considerado uno de los espectáculos más prestigiosos a nivel internacional en su género, el elenco cubano dejó una huella que no será fácil de borrar y la «Gran Gala de Estrellas”, como se denomina la gira, no defraudó a los asistentes de todas las edades.
Algunos de los presentes dijeron a Prensa Latina que fue una presentación sin igual donde artistas de élite dieron vida a obras clásicas con gracia y pasión.
Entre los asistentes estaba el director del Ballet Nacional de El Salvador, Rumen Ivano Rashev, un búlgaro que ama el arte de los cubanos y que compartió con elencos de ese país, incluido el Ballet de Camagüey.
“Es excelente tener un intercambio entre colectivos como el cubano, es nutritivo, intercambiamos experiencias. Tenemos un intercambio con los cubanos, antes trabajamos con el gran coreógrafo Alberto Méndez y con la gran maestra Laura Alonso”, dijo Rashev.
Por su parte, Balaguer, la directora del elenco camagüeyano dijo que este intercambio “es muy importante, es parte de esa integración cultural que debe tener Latinoamérica. Es un intercambio de artistas de diferentes países con intereses similares. Las cultura es muy importante para el ser humano, es el alimento espiritual que une personas”.
“Creo que eso es lo que nos está faltando, una unidad, una cohesión, nuestros países tienen una cultura muy rica y muy vasta”, subrayó.
“Yo creo que siempre que visitamos por primera vez un escenario nos consideramos embajadores de la cultura, de la amistad, del abrazo fraterno entre los pueblos, y eso es muy bonito”, concluyó Balaguer, rebosando satisfacción sobre la presentación de sus pupilos.