Mirna Jiménez
@DiarioColatino
El secretario de comunicaciones de la presidencia, Roberto Lorenzana, recomendó al presidente electo, Nayib Bukele, que no vaya optar por el camino de la confrontación política con la oposición porque lo único que conseguirá es complicar la situación del país y en consecuencia, afectar a la misma población.
“En materia de gobernabilidad no se ve claro, porque esta conducta de confrontación que se ha iniciado después del día de las elecciones, no va abonar en el tema del entendimiento. Mi llamado es al entendimiento, lo que necesitamos tener es una ruta clara que no vaya a descarrilar al país desde el punto de vista institucional, desde el punto de vista financiero”, advirtió.
Lorenzana dijo que el principal desafío del país es la gobernabilidad y que para ello se necesita el concurso de todos los sectores de la sociedad sin descalificar a nadie, pero que las primeras señales que ha dado el presidente electo, lamentablemente no son buenas.
“En el primer discurso de un presidente electo, históricamente se sale de la agenda electoral, deja de ser candidato y generalmente en ese momento asume que es presidente de todo el país y que va a necesitar un entendimiento con otros sectores, generalmente se lanzan puentes, esa ha sido la conducta histórica y yo creo que es una conducta correctas. Pero lo que vimos en el primer discurso es el llamado a las bases del FMLN y de ARENA a que se salgan de esos partidos y que lo acompañen, a las bases, porque los dirigentes todos son malos”, señaló Lorenzana respecto al discurso de Bukele en la Plaza Morazán la noche del 3 de febrero.
El funcionario recordó que Bukele necesitará de la asamblea legislativa donde no tiene ninguna correlación a su favor y que el hecho de que tenga algunos diputados que han expresado abiertamente que lo van a apoyar, no quiere decir que el respaldo es automático y que se le dará un cheque en blanco.
Lorenzana también se refirió a declaraciones del vicepresidente electo, Félix Ulloa, como otra señal de confrontación, luego que este advirtiera que aquellos partidos que no los acompañen en tales o cuales propuestas, serán barridos en 2021 y por eso los tienen que apoyar.
“Debe de abrirse la posibilidad de los disensos en el país por la vía civilizada, por la vía del diálogo. Si el camino es la confrontación como lo estamos percibiendo, (si) el estilo de dialogar por la vía del twitter, haciendo acusaciones sin tener pruebas y diciendo que va procesar penalmente, no es el camino correcto”, dijo el secretario de comunicaciones en el programa Frente a Frente de TCS.
Bukele publicó la semana pasada un mensaje en twitter donde acusaba a funcionarios del gobierno de estar contratando nuevo personal, trasladando empleados por contrato a ley de salarios y reubicando a asesores y empleados de confianza, lo que fue refutado por Lorenzana. “Es un estilo que no va reflejando una conducta de gobernabilidad y si de algo sirve -no tengo porqué dar consejos- pero sí creo que el desafío principal del presidente electo con todas las fuerzas políticas está en el tema de la gobernabilidad”, recalcó.
Lorenzana también dijo que si el FMLN tomara la decisión de hacer alianza con ARENA y bloquear al próximo gobierno en la asamblea legislativa estaría cometiendo un “grave error”, pero que el partido tampoco le puede dar un cheque en blanco a Bukele.
Si nos están ofendiendo, si nos están agrediendo y nos están atacando ¿cómo es posible que fácilmente se pueda apoyar algunas iniciativas? el FMLN debe poner en el centro el interés nacional, todos debemos ponerlo; no el interés que salga bien el presidente o que salga mal”, afirmó.
Lorenzana dijo que aquello que presente el gobierno a aprobación de la asamblea legislativa y al pueblo le favorezca, el FMLN debe apoyarlo y debe ser la guía porque estratégicamente esa fue la razón de ser del partido de izquierda.
El funcionario también expresó su deseo de que el país mantenga una política exterior independiente y la prueba de fuego para confirmar sí El Salvador mantiene esa condición son el mantenimiento de las relaciones diplomáticas con la República Popular de China o marchar en retroceso con la vuelta hacia Taiwán.