Washington /AFP
Un grupo de 18 congresistas demócratas firmaron una carta dirigida al secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, criticando las posturas del candidato favorito a las presidenciales del domingo en Brasil, Jair Bolsonaro, y pidiéndole que deje claro que Estados Unidos considera “inaceptables” muchas de sus actitudes.
“Un extremista de ultraderecha llamado Jair Bolsonaro es el principal contendiente para las elecciones presidenciales del 28 de octubre en el país y se está beneficiando de una campaña electoral marcada por la violencia política y un diluvio de noticias falsas y de desinformación”, afirmaron los congresistas a modo de introducción en su carta.
La misiva fue firmada por los representantes demócratas Alma Adams, Raúl Grijalva, Pramila Jayapal, Hank Johnson, Barbara Lee, Alan Lowenthal, Betty McCollum, James P. McGovern, Eleanor Holmes Norton, Frank Pallone, Mark Pocan, Jamie Raskin, Bobby L. Rush, Jan Schakowsky, José E. Serrano, Nydia M. Velázquez y Keith Ellison. En la carta los congresistas dijeron al secretario de Estado que es imperativo que el gobierno estadounidense condene cualquier tipo de violencia política en Brasil.
Bolsonaro, un excapitán del Ejército de 63 años, es el favorito de la contienda electoral de este domingo en Brasil después de imponerse en la primera vuelta con un 46% de los votos frente a 29% de su rival Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores.
Los congresistas criticaron que Bolsonaro elogie frecuentemente la dictadura militar en Brasil (1964-85) y que sostenga un discurso de odio hacia las minorías. El candidato es conocido por sus declaraciones incendiarias y sus comentarios misóginos y homofóbicos.
“Le pedimos a usted que deje claro al gobierno de Brasil que Estados Unidos considera que estas posiciones son inaceptables y que va a haber consecuencias severas si Bolsonaro sigue adelante con las amenazas pronunciadas durante la campaña presidencial”, afirmaron los legisladores.
Los congresistas dijeron que dadas las repercusiones regionales de una victoria de Bolsonaro, esta no es una amenaza que se pueda tomar a la ligera.
“Le corresponde a usted y a otros portavoces de nuestro gobierno condenar cualquier tipo de violencia política en Brasil y adoptar una postura firme de oposición a una retroceso de este tipo, dejando claro que la asistencia y la cooperación de Estados Unidos con Brasil depende de la defensa de los derechos humanos y los valores democráticos”, concluyeron.
Alexander Main, director de política internacional del Centro de Investigación de Economía y Política (CEPR), explicó a la AFP que es raro que los miembros del Congreso adopten posturas públicas sobre un candidato extranjero durante la campaña.
“En este caso, algunos miembros del Congreso se han motivado a hablar debido a la enorme preocupación de que el potencial ganador de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Brasil pueda seguir adelante con sus amenazas de purgar a la oposición de izquierda y establecer un régimen militar de facto, aunque por vía democrática”, afirmó el experto.