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Alexander Pineda
@AlexPineda27
La Facultad de Ciencias y Humanidades, a través de su Comité Pro Memoria Histórica y la Asociación de Académicos de la Universidad de El Salvador (ASAUES), conmemoraron ayer el trigésimo séptimo aniversario luctuoso del asesinato del rector Félix Ulloa.
El académico fue atacado por un “escuadrón de la muerte” un 28 de octubre de 1980, a escasos metros de la Universidad de El Salvador, tras varias horas en estado delicado de salud, falleció al día siguiente.
En el acto conmemorativo estuvieron presentes familiares del rector mártir, representantes de sindicatos del alma máter, autoridades de la Facultad de Ciencias y Humanidades y estudiantes aglutinados en el Movimiento Estudiantil de Ciencias y Humanidades (MECH).
Félix Antonio Augusto Ulloa nació en el municipio de Chinameca, departamento de San Miguel, el 7 de septiembre de 1929, en el seno de una familia que subsistía de la recolección de café. Se graduó de maestro en la Escuela Normal Superior y ejerció la docencia mientras estudiaba Ingeniería Industrial en la Universidad de El Salvador, y fue electo como rector en noviembre de 1979. Al momento de su asesinato ostentaba el cargo de vicepresidente de la Asociación Internacional de Universidades.
En la conmemoración disertó Félix Ulloa, hijo del fallecido rector, quien recordó que su padre fue muy activo en los trascendentales movimientos políticos estudiantiles de las décadas de 60 y 70. La vinculación política de Ulloa fue tal, que en abril de 1980, en su calidad de rector de la UES, firmó el acta de constitución del Frente Democrático Revolucionario, aliado estratégico del FMLN durante el conflicto civil, considerado este acto una clara afrenta a la dictadura militar.
Félix Ulloa hijo explicó que la frase de su padre: “La Universidad de El Salvador se niega a morir” estaba vinculada a la lucha constante porque esta se mantuviera en funcionamiento a pesar de las múltiples intervenciones militares que sufrió antes y durante la guerra civil, violentando así su autonomía.
“Él decía: la Universidad no son los edificios, no son las aulas, la Universidad es el espíritu universitario; él planteaba que no nos podemos quedar con solo las tres funciones principales de la Universidad, lo académico, lo investigativo y la proyección social, hay que fomentar el espíritu universitario, la Universidad fue y debe ser siempre la conciencia crítica de la sociedad”, expresó.
Asimismo, Mauricio Ulloa, también hijo del desaparecido rector, dijo que es necesario tener presente a todos los mártires universitarios y espera que esta iniciativa por la preservación de la memoria histórica se fortalezca al interior de UES, asimismo, recordó que durante varios años, la figura de Félix Ulloa permaneció en el olvido, hasta que en 2005, en el vigésimo quinto aniversario de su muerte, autoridades universitarias hicieron entrega de un doctorado honoris causa póstumo a su familia.
“Cuando voy a otras universidades, ellos me dicen que por sus aulas pasaron ganadores del Nobel, otros dicen que tienen el campus más grande, otros dicen que ahí estudiaron ganadores en juegos olímpicos y me preguntan, ¿y ustedes?, yo les digo que UES es una de las universidades más dignas del mundo, porque sus muros están manchados por la sangre de estudiantes, docentes y trabajadores que dieron su vida buscando la liberación del pueblo en tiempos difíciles y que aún está pendiente”, finalizó Ulloa.
