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Damasco/PL
La cancillería siria declaró que los acuerdos de las zonas de distensión para este país árabe, adoptados en Astaná, Kazajistán, no conceden legitimidad en absoluto a la presencia de Turquía en el territorio de este país.
De acuerdo con una fuente del Ministerio de Relaciones Exteriores, citada por la Agencia de Noticias Sana, el gobierno de este país encargó a la parte rusa e iraní completar el último convenio sobre la creación de una nueva zona segura en la norteña provincia de Idlib, por ser los dos países garantes de la parte siria.
Ello -explicó- constituyó una oportunidad para la parte turca -garante de los grupos terroristas armados- para detener el apoyo al terrorismo, de forma tal que ayude a restablecer la seguridad en esas áreas.
Mas adelante, la declaración expresa que Siria afirma que el acuerdo sobre el establecimiento de una zona de distensión en Idlib es un convenio provisional, cuyo objetivo es aliviar el sufrimiento de los ciudadanos y permitir el acceso y transporte a Alepo y zonas adyacentes.
Ratificó, en ese sentido, que al mismo tiempo el gobierno de este Estado árabe defiende la unidad y la independencia del territorio sirio, ‘y seguirá luchando contra el terrorismo en todo el territorio sirio’.
Tras aprobarse en Astaná ayer la creación de una nueva zona de distensión en la provincia de Idlib, el jefe de la delegación siria a las consultas de Astana, Bashar Al Jafaari, reiteró que la presencia de cualquier fuerza extranjera en territorio sirio sin la aprobación del gobierno es ilegítima.
La resolución firmada por Turquía, Rusia e Irán, al término de la sexta ronda de negociaciones en Astaná para poner fin al conflicto armado en Siria, delimitó las áreas de control donde cada uno de los países garantes deben supervisar el alto al fuego entre las partes enfrentadas.
Varias delegaciones, entre ellas la de Rusia, consideraron que los documentos adoptados en la reunión de Astaná devienen base sólida para fortalecer el régimen de cese de hostilidades, como condición básica para impulsar el diálogo entre el gobierno sirio y la oposición.
