Insatisfacción, viagra search alegría y esperanza. Los jugadores de Costa Rica mostraron todas esas emociones, purchase a la vez, seek al despedirse del mejor Mundial de fútbol de su historia.
Que no sea un éxito pasajero y que suponga un antes y un después en el fútbol “tico” depende de los próximos cuatro años, hasta Rusia 2018, empezando en septiembre por la Copa Centroamericana y siguiendo dentro de un año por la Copa de Oro de la Concacaf.
“Todo gran poder, todo gran logro trae una gran responsabilidad”, dijo el sábado el capitán, Bryan Ruiz, repitiendo casi las palabras que el tío Ben le dijo a su sobrino Peter Parker, alias Spiderman.
Y es que los jugadores “ticos” son casi superhéroes en su país. “Hay un futuro prometedor para Costa Rica, seguro que la Federación lo va a hacer bien. La mayoría de este grupo tenemos edad para seguir y eso va a ser de mucha ayuda para el futuro”, agregó Ruiz, uno de los más destacados en el Mundial en el que por primera vez el país alcanzó los cuartos de final y estuvo sólo a una tanda de penales de llegar a las semifinales.
Diecisiete de los 23 hombres que acudieron al Mundial tiene 30 años o menos. El delantero Joel Campbell, del que se espera que sea la gran estrella, tiene 22 años recién cumplidos.
“Tienen que hacerlo con la cabeza”, pidió también a la Federación Christian Bolaños, otra de las figuras “ticas”, que pidió usar como base el éxito de un Mundial del que Costa Rica se marchó invicto y con triunfos ante Uruguay e Italia.
“Se podía llegar a semifinales, lo que ha hecho este grupo queda para la historia”, lamentó Bolaños tras caer en Salvador frente a Holanda en la tanda de penales.
Ningún otro equipo de la Concacaf llegó a cuartos, por lo que el futuro inmediato pasa por imponerse en una región dominada siempre por México y ahora por Estados Unidos. Luego, llegaría Rusia, donde los “ticos” ya no serían desconocidos. ¿Serán favoritos? “No, no creo, tendremos un gran reto porque van a esperar mucho de nosotros”, dijo a dpa Ruiz, que como Bolaños tiene el futuro en el fútbol europeo pendiente.
“La experiencia internacional”, dio Bolaños una de las claves del éxito del equipo en Brasil, el mejor escaparate posible. “Se rompió esa barrera, ahora va a haber más jugadores en el exterior y eso es indispensable”, aventuró.
Once de los 23 actúan ya en Europa, pero se espera que el número crezca tras el buen desempeño mundialista y que alguno como Bolaños o Ruiz lleguen a un equipo más grande. Entre ellos, seguramente, Keylor Navas, el astro indiscutible del equipo y protagonista de una temporada brillante con el Levante en España. Todo unido le convierte una pieza codiciada en el mercado de fichajes de Europa.
El protagonismo del técnico, el meticuloso Jorge Luis Pinto, es otra de las causas de los triunfos. “El trabajo de Pinto fue bueno en la parte táctica, exhaustivo”, afirmó Ruiz.
La continuidad de Pinto, ahora también muy cotizado, será la primera gran decisión de los dirigentes.
“Estoy agradecido con la vida, con Costa Rica, muy agradecido con todo el pueblo, con los dirigentes por darme la posibilidad de vivir uno de los grandes sueños de mi vida. Y como dice la canción mexicana, el sueño es volver, volver”, dijo el sábado sin que pudiera inferirse nada sobre su futuro.
“Hemos evolucionado”, aseguró el técnico, orgulloso del fútbol y de la calidad mostrada sobre la cancha, donde sólo recibió dos goles.
“No nos podemos dar ahorita por un equipo que vamos a ganar el Mundial, eso se gana en el terreno de juego”, rebajó expectativas Michael Umaña. “Queremos ir rompiendo barreras como las rompimos en este Mundial, hay mucho trayecto”, agregó mirando al futuro. Celso Borges, uno de los hombres con más criterio y sostén en el medio campo, espera que el éxito contribuya a que haya “un avance”. “Se pueden dar grandes cosas porque hay material”, afirmó en referencia a los jóvenes valores que llegarán, pese a la dificultades del pequeño país centroamericano.
“Demostramos al mundo que Costa Rica tiene muy buen nivel futbolístico, lo pusimos en los ojos del mundo”, afirmó a dpa Umaña, celebrando que el equipo haya dejado de ser un desconocido para el gran público, que a partir de ahora se fijará mucho más en un país que quiere dejar de ser sorpresa y convertirse en habitual.
“Todos pensábamos hasta en ser campeones del mundo, lo soñábamos”, graficó Ruiz las nuevas esperanzas “ticas”.