La Habana/AFP
El presidente de Costa Rica, viagra Luis Guillermo Solís, inició el domingo una visita a La Habana dominada por la crisis migratoria que estalló hace un mes cuando miles de cubanos que pretendían llegar a Estados Unidos quedaron varados en suelo costarricense.
Solís confirmó a su llegada que el «tema estará en la agenda» que tratará con su homólogo Raúl Castro, en el encuentro que tienen previsto sostener el martes.
Sin ofrecer más detalles sobre lo que espera discutir con Castro, el mandatario centroamericano destacó que su visita de dos días servirá para afianzar el proceso de normalización diplomática.
Tenemos como objetivo «terminar con el proceso de normalización de nuestras relaciones, que desde los años noventa ha venido produciéndose de manera progresiva», dijo Solís en el aeropuerto José Martí.
Costa Rica restableció relaciones con Cuba en 2003 a nivel consular, y en 2009 se reanudaron plenamente los nexos diplomáticos.
Los dos gobiernos habían planificado este encuentro presidencial en La Habana antes de que surgiera la crisis migratoria.
La visita de Solís pretendía en un comienzo ampliar el portafolio bilateral de negocios, pero la falta de solución al drama de los cubanos confinados en Costa Rica terminó convirtiéndose en el tema central.
Alrededor de 5.000 cubanos quedaron varados en el país centroamericano sin poder continuar su trayecto por tierra hacia Estados Unidos desde que Nicaragua les cerró el paso por su territorio el 15 de noviembre pasado.
Las autoridades costarricenses han tenido que improvisar albergues en escuelas, gimnasios, iglesias y salones comunales en su zona norte para acoger a los isleños en espera de una salida para que continúen su trayecto.
Las gestiones de Costa Rica con Guatemala y Belice para trasladarlos por avión a alguno de esos países se vieron frustradas por su negativa de permitirles el paso, mientras México ha dicho que aceptaría darles tránsito por su territorio solo si ingresan por tierra.
San José ha denunciado que la crisis de los cubanos expuso graves deficiencias en la integración centroamericana debido a que países como Nicaragua, Guatemala y Belice se han negado a ayudar en la solución del problema.
Los cancilleres de Centroamérica junto a los de Colombia, Ecuador, México y Cuba, se reunieron el 24 de noviembre pasado en El Salvador en busca de una salida para los cubanos, pero el encuentro fracasó cuando Nicaragua insistió en cerrarles el paso.