Ciudad de Guatemala / AFP
Organizaciones de víctimas del conflicto armado de Guatemala criticaron el jueves la militarización de la fuerza pública, así como el uso de soldados en actividades del presidente Jimmy Morales, quien enfrenta una oleada de manifestaciones en su contra.
«Rechazamos rotundamente la participación del Ejército en las conferencias de prensa del presidente Jimmy Morales y la presencia de militares fuertemente armados durante las manifestaciones pacíficas», indica un comunicado de las entidades sociales.
Las organizaciones indicaron que las acciones para «militarizar la seguridad pública ponen en riesgo los pocos avances democráticos que hemos construido a partir de la firma de la paz», el 29 de diciembre de 1996, para poner fin a una guerra de 36 años.
El gobernante enfrenta una ola de críticas desde el pasado 31 de agosto, cuando rechazó pedir a la ONU una nueva ampliación del mandato de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig). Al hacer el anuncio estaba rodeados de militares y policías.
Cuatro días después, Morales prohibió el ingreso al país del jefe de la Cicig, el exmagistrado colombiano Iván Velásquez, quien se encontraba de viaje en Nueva York y Washington.
La Cicig junto con la fiscalía ha pedido en dos ocasiones levantar los fueros del presidente para investigarlo por sospechas de corrupción en su campaña de 2015.
El miércoles, el ejército desplegó a cientos de militares en las calles aledañas al Congreso para impedir que manifestantes ingresaran a la sede legislativa donde estaba Morales en una actividad para celebrar los 197 años de la independencia de Guatemala.
La actitud de Morales contra la Cicig llevó al Consejo Superior y la asociación de estudiantes de la estatal Universidad de San Carlos a declararlo «non grato».
Previamente, Morales lanzó duras críticas a la única universidad pública de Guatemala al considerar que «sus estudiantes salen muy caros».
Para las agrupaciones sociales, las acciones de Morales son «una estrategia para imponer miedo y tratar de callar las demandas de la población, tal como lo hicieron en los años 80», los años más violentos de la guerra.
Asimismo, pidieron la renuncia del mandatario y otros funcionarios del gobierno, mientras expresaron su respaldo a la Cicig y el retorno del jurista colombiano.