Ciudad de Guatemala/AFP
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) llamó a las autoridades de Guatemala a priorizar la búsqueda de los miles de desaparecidos que dejó la guerra civil entre 1960 y 1996.
A más de dos décadas del fin del conflicto armado que enfrentó al ejército y guerrillas marxistas, «sorprende» que el país haya avanzado poco en la búsqueda de los desaparecidos, dijo el francés Kian Abbassian, jefe de misión del Comité Internacional de la Cruz Roja en Guatemala, en entrevista con la AFP.
Abbassian señaló que de los 45.000 desaparecidos registrados de la guerra, solo se han encontrado a unos 5.000, principalmente por el trabajo e iniciativa de organizaciones de familiares de víctimas y el apoyo de la comunidad internacional.
«Esperamos que no solo la sociedad civil sino también las autoridades puedan avanzar mucho más rápido (en la búsqueda) para estas familias que tienen derecho a saber» el paradero de sus seres queridos, agregó.
Guatemala conmemora el próximo domingo el Día Nacional de la Dignidad de las Víctimas del Conflicto Armado Interno, una guerra que según una Comisión de la Verdad auspiciada por la ONU dejó 200.000 muertos y desaparecidos.
El jefe de misión del CICR en Guatemala agregó que, al ritmo que lleva el país para encontrar a los desaparecidos, se necesitarían 80 años para localizar a los 40.000 restantes.
«Es un cálculo para imaginarnos de la magnitud del problema (de los desaparecidos), porque nos sorprende que no sea una prioridad en el país», agregó Abbassian.
El activista también señaló que la sociedad debe ser «más solidaria y menos indiferente» con el dolor de las familias de las víctimas.
«Estas décadas de sufrimiento se tienen que considerar como un problema humanitario de hoy y no del pasado, porque esta ausencia es un problema en los corazones» de las familiares, afirmó.
Consideró «necesario y fundamental» que el Congreso apruebe una ley para crear una comisión nacional de búsqueda para apoyar la localización de los desaparecidos.
El informe de la Comisión de Esclarecimiento Histórico, presentado en 1999, atribuyó la mayoría de matanzas a las fuerzas de seguridad del Estado, sobre todo el ejército, y señaló que las poblaciones indígenas fueron las más golpeadas durante los 36 años del conflicto.