Saúl Méndez
Colaborador
La Cruz Roja Salvadoreña (CRS) conmemoró el jueves 13 de marzo su 140 aniversario de fundación, consolidándose como una de las instituciones humanitarias más emblemáticas del país. Desde su creación en 1885, durante el mandato del presidente Rafael Zaldívar, la CRS ha sido protagonista en la atención de emergencias y desastres, brindando auxilio en momentos críticos.
Cruz Roja Salvadoreña forma parte del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, y desde sus inicios ha operado bajo los siete principios fundamentales que rigen a esta red global: Humanidad, Imparcialidad, Neutralidad, Independencia, Voluntariado, Unidad y Universalidad.
Estos valores han guiado la labor de sus voluntarios, quienes han dedicado sus esfuerzos a prevenir y aliviar el sufrimiento humano en las circunstancias más adversas.
La historia de la Cruz Roja en El Salvador tiene como pioneros a Luis Vandyck y Astor Marchesini, quienes redactaron el primer reglamento de la institución. El presidente Zaldívar y Antonio Castro, ministro de Beneficencia, permitieron el acuerdo ejecutivo que otorgó personalidad jurídica a la Sociedad Nacional de la Cruz Roja en El Salvador.
Según el artículo primero de su reglamento, el objetivo principal de la CRS era «socorrer a los enfermos y heridos militares, de cualquiera de las partes beligerantes, ya sea en el campo de batalla o en los hospitales del ejército». Este compromiso se puso a prueba apenas dos semanas después de su fundación, cuando El Salvador se vio inmerso en un conflicto con Guatemala. Durante este episodio, la Cruz Roja Salvadoreña organizó servicios de camilleros e improvisó hospitales de campaña, destacándose la labor de los doctores Juan Padilla Matute y Herna Power, quienes atendieron tanto a las tropas salvadoreñas como a los heridos del ejército guatemalteco.
En el marco de su 140 aniversario, la CRS realizó un simulacro de rescate vehicular y atención prehospitalaria sobre el bulevar Monseñor Romero, a la altura del Cine al Aire Libre.
Durante la actividad, los miembros de la Unidad de Rescate y los voluntarios demostraron su destreza y preparación técnica, reflejando la capacidad de respuesta que ha caracterizado a la institución a lo largo de su historia.
Hoy, la Cruz Roja Salvadoreña beneficia anualmente a más de 15 mil personas a través de 12 proyectos de impacto comunitario. Además, ha atendido alrededor de 71 mil emergencias, gracias al esfuerzo de más de dos mil voluntarios distribuidos en las 64 seccionales a escala nacional.
Estos voluntarios forman parte de diversas filiales, como Socorrismo, el Comité de Damas, la Cruz Roja de la Juventud y los Guardavidas Voluntarios.
Más allá de su labor en rescate y atención prehospitalaria, la CRS ofrece una amplia gama de servicios, entre los que destacan atención odontológica, una clínica de emergencias, terapia respiratoria y un centro de donación de sangre.