Miguel Ángel Dueñas Góchez*
Me contaba un amigo (restaurador de antigüedades) que fue contratado por representantes de la Iglesia Católica Romana en El Salvador para restaurar unas imágenes de madera y bronce. Lo que a él le extrañó fue el protocolo para poder entrar al lugar donde se le citó, además del lujo que se veía por todos lados (las vajillas con oro incrustado en tasas y platos y una servidumbre de “reyes”). El contraste es que a los alrededores del lugar hay mucha pobreza, y lo irónico es que no hay desprendimiento ni compasión alguna de estos líderes religiosos hacia las personas empobrecidas.
Por ejemplo, cita de VOCETO, Darío Menor (05/11/2015): “para conseguir que alguien sea declarado santo es tan importante el dinero que se esté dispuesto a poner encima de la mesa como los milagros que se hayan producido gracias a la intercesión del fallecido. Lo saben bien las congregaciones religiosas más modestas, que se ven obligadas a buscar fondos hasta debajo de las piedras para conseguir que la Iglesia canonice a aquella monja o padre que gozó de fama de santidad durante su vida. El nuevo escándalo de filtraciones de documentos confidenciales de la Santa Sede, conocido como ‘Vatileaks 2’, ha desvelado cuánto cuesta un proceso de beatificación o de canonización: la cosa sale por una media de 500,000 euros, aunque si se suman los regalos que suelen hacerse a los prelados que participaron en la causa y el coste de las fiestas para celebrar el ascenso a los altares, la factura puede subir hasta los 750,000 euros.
La cifra la aporta Gianluigi Nuzzi en ‘Vía Crucis’, el libro donde recoge la documentación confidencial que le habría entregado el sacerdote riojano Lucio Vallejo Balda, retenido en una celda del Vaticano. También fue arrestada por esta filtración la laica italiana Francesca Chaouqui, quien coincidió con el sacerdote español en la comisión creada por el Papa para estudiar cómo realizar la reorganización administrativa y económica de la Santa Sede”. (http://www.finanzas.com/sociedad/20151105/santidad-tiene-precio-euros-3287084.html).
De acuerdo a ello, se sabe que el Vaticano es la institución más rica que existe, si vendiera todo lo que tiene se acabaría la pobreza en el mundo.
* Lic. en Relaciones Internacionales.