Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
“Lo que hemos encontrado con la investigación es que pueden haber efectos negativos con la desaparición de trabajos, con niveles de educación intermedio, relacionados a la administración”, dijo Silvia Rubio, investigadora social de la Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (ORMUSA), durante la presentación del documento “Mujer y Mercado Laboral 2019. El Salvador: El futuro del Trabajo con la Industria 4.0”.
La “industria 4.0” o Cuarta Revolución Industrial, que supone la evolución técnica y económica de la humanidad, es el punto de partida de Rubio para valorar el impacto que tendría en el país la modificación de la naturaleza de los puestos de trabajo que, señaló, muchos están distanciados de dar cobertura social; pero también, algunos con efectos positivos, como empleos en áreas en donde tradicionalmente no estaban las mujeres.
En la investigación, que aborda la transformación tecnológica en algunas relaciones de empleo creando otras diferentes a las establecidas en el país, se destaca el empleo parcial y el empleo temporal.
“Hay otros efectos negativos que se pueden ver a nivel agregado, que afectan tanto a mujeres y hombres en la distribución del ingreso, que es una pérdida de la masa salarial, como porcentaje total, en la remuneración a los factores en la economía”, agregó.
En cuanto a la brecha del empleo de las mujeres y la tecnología, Rubio sugirió activar programas en donde se fortalezcan las áreas tecnológicas y matemáticas, que suelen ser fisuras existentes del trabajo actual, y con los desafíos que representaría la profundización de la industria 4.0, que podría llevar a la segregación del empleo en índices más profundos a futuro en el país.
Carmen Urquilla coordinadora del programa Justicia Social, Laboral y Económica de ORMUSA señaló, que la narrativa del tema del empleo ha estado en manos de los dueños de los medios de producción y empresas, aunque el impacto directo es a las mujeres y hombres que se encuentran en el mercado laboral.
“Las revoluciones industriales no son neutras, van a afectar de manera diferentes a hombres y mujeres. Y nuestro interés es informar que con este tipo de revoluciones podría correrse el riesgo de la creación de empleos atípicos, donde las personas trabajan en plataformas y no tienen ninguna vinculación laboral con los dueños de estas aplicaciones. Se ven expuestos a jornadas laborales extensas, sin explotación social. Entonces, queremos establecer en qué estado se encuentran los derechos laborales de la población salvadoreña y en qué estado nos va a encontrar la revolución 4.0, que ya está entrando al país”, dijo Urquilla.
Asimismo, resaltó que El Salvador tiene algunos espacios débiles, en cuanto a normativas laborales, lo que podría terminar impactando en los derechos de las y los trabajadores nacionales.
“La flexibilización laboral es un temor de trabajadores y trabajadoras, donde precisamente se corre el riesgo de perder algunos derechos ya ganados, como la indemnización, vacaciones, que nuestra normativa laboral estípula como requisitos y a lo que las personas pueden acceder. Entonces una industria de este tipo, que no respeta estos u otros principios laborales, podría ser peligrosa para la población trabajadora.
Y, si bien este tipo de empleo podría reducir las brechas de desigualdad que existen entre hombres y mujeres, también podría ser lo contrario, si no se aplican los cuerpos normativos de derechos laborales”, precisó.