Beni / AFP
Decenas de manifestantes invadieron y prendieron fuego la base de la ONU en Beni, en el noreste de la República Democrática del Congo, en el marco de una protesta contra las masacres atribuidas al grupo armado ADF y la «inacción» de los Cascos Azules.
Al menos cuatro manifestantes murieron el lunes en los disturbios anti-ONU en Beni, en el este de la República Democrática del Congo, indicó a la AFP la fiscalía de la justicia militar.
«Hubo cuatro muertos durante el día», declaró el auditor (procurador) militar Kumbu Ngoma, que menciona la posibilidad de una quinta víctima.
«Para esta noche, me dijeron que habrá otra muerte. No he visto aun el cuerpo», dijo. «Hay diez civiles heridos y tres militares congoleños heridos», agregó.
Algunas «investigaciones» determinarán el origen de los disparos: «No sabemos quien disparó», puntualizó Ngoma.
Un corresponsal de la AFP oyó muchos disparos durante el día frente a las instalaciones de Naciones Unidas atacadas por los manifestantes.
La presidencia de la RDC anunció operaciones militares «conjuntas» con la ONU, tras este ataque contra la Misión de Naciones Unidas en Congo (Monusco) de Beni, donde la tensión de los últimos días dejó en suspenso la lucha contra la epidemia de Ebola que mató a cerca de 2.200 personas.
«Viviendas del personal de Naciones Unidas fueron atacadas y vandalizadas», indicó antes una portavoz de la Monusco contactado por la AFP.
La oficina atacada se encuentra al lado de un campamento de Cascos Azules de Malawi, según la Monusco. Fuerzas congoleñas también estaban presentes en el lugar.
Cascos Azules procedieron a «disparos al aire», pero «ninguno fue dirigido a los manifestantes», afirmó a la AFP un vocero de la misión de la ONU.
Antes de que irrumpieran los manifestantes, dos helicópteros de Naciones Unidas se habían posado brevemente dentro de la base civil de la ONU, y luego se marcharon, constató el corresponsal de la AFP.
Las fuerzas de seguridad congoleñas dispararon balas reales, a menudo de manera totalmente disuasiva, para intentar contener a los manifestantes cerca de esa base y otra no lejos, según la misma fuente.
Al menos un manifestante y dos policías resultaron heridos, según el corresponsal de la AFP en la lugar.
De visita en París, la presidenta del Parlamento congoleño, Jeanine Mabunda, se preguntó públicamente sobre el papel de la Monusco, estimando que la misión, de un costo de mil millones de dólares por año, «no puede permanecer indefinidamente».
«Hay un malestar entre la presencia, el costo de la Monusco en RDC y los resultados obtenidos», declaró a la AFP Mabunda, quien juzgó «legítimo que las poblaciones se pregunten porqué esta fuerza continúa en la RDC».
Antes de atacar la base de la ONU en Beni, los manifestantes habían incendiado por la mañana la alcaldía de esta ciudad, que quedó parcialmente destruida, según el corresponsal de la AFP.
– Luchas anti-Ebola amenazada –
La lucha contra la epidemia de Ebola, que azota a la región, está interrumpida desde el viernes.
Fue en Bokeine, barrio del norte en la entrada de Beni, donde ocho civiles murieron en la madrugada del lunes en una nueva matanza atribuida a las Fuerzas Democráticas Armadas (ADF), informó un portavoz del ejército.
En total 77 civiles han perdido la vida en Beni y su entorno a manos de las ADF en represalia por la ofensiva del ejército congoleño contra sus bases, anunció el 30 de octubre.
Los manifestantes denuncian desde hace varios días la inacción del ejército y de los Cascos Azules presentes en la región, ante las matanzas de las ADF.
El sábado, un manifestante murió cuando la policía dispersó una marcha en Beni.
La Monusco se defiende de las acusaciones subrayando que el ejército congoleño lanzó sus operaciones contra las ADF de manera unilateral.
Los voluntarios de las oenegés en Beni fueron invitados a quedarse en sus casas este lunes, «al abrigo de ángulos de disparo y lejos de puertas y ventanas», indicaron fuentes humanitarias.