Sao Paulo/dpa
Mientras la FIFA alerta que los preparativos para el Mundial de Brasil 2014 ya entraron en “cuenta regresiva” y pide “empeño” para que todo esté listo dentro de exactos 24 días, viagra stuff el gobierno brasileño intenta tranquilizar al mundo respecto a las mayores preocupaciones: las obras en estadios y aeropuertos y la seguridad.
A su llegada hoy a Brasil, el secretario general de la FIFA, Jérome Valcke, advirtió que el estadio Arena Corinthians, que el próximo 12 de junio albergará el partido inaugural entre Brasil y Croacia, aun necesita “de 100 por ciento de empeño de todos para garantizar la estructura necesaria para la apertura”.
Valcke permanecerá en Brasil a partir de hoy y hasta que se dispute en Río de Janeiro la gran final del torneo, el 13 de julio, hizo las declaraciones a través de su cuenta en Twitter (@jeromevalcke).
El flamante y lujoso estadio del “Timao” recibió el domingo su primer partido oficial, entre Corinthians y Figueirense, válido por la quinta fecha del Campeonato Brasileño.
El estreno de la arena, cuyo costo final rondará los 1.000 millones de reales (unos 452 millones de dólares), tuvo lugar en medio de una lluvia que acusó la falta de cobertura en el techo en varios sectores del estadio, en la que además falta terminar de instalar las tribunas provisorias, entre otros pendientes.
En lo que fue interpretado como una respuesta a las autoridades locales, que consideraron que el estadio aprobó su primera prueba, Valcke advirtió que en esta oportunidad solo fueron habilitados 40.000 asientos, del total de 68.000 que estarán disponibles cuando funcione con capacidad total.
“Un evento de prueba no se compara en escala, necesidades y atención global a la apertura de #Copa2014. Un partido que atrae más de 65.000 personas en el estadio y mil millones en la TV. Cuenta regresiva”, avisó.
A partir de esta semana, la FIFA y el Comité Organizador Local (COL) del Mundial asumirán el control de los 12 estadios mundialistas.
Respecto a las protestas anti-Mundial, Valcke publicó hoy en la página web de la FIFA una columna en la que contradijo en forma categórica la consigna bajo la cual fueron convocadas las manifestaciones: “Nao vai ter Copa (No va a haber Copa).
“No hay ninguna duda: ‘Vai ter Copa’”, escribió en portugués el dirigente, quien fue más allá: “De hecho, la Copa del Mundo ya ha llegado a Brasil”.
Por su parte, y bajo la mirada atenta de la FIFA, el gobierno de la presidenta Dilma Rousseff salió hoy a intentar dar tranquilidad sobre la seguridad durante la cita y el buen funcionamiento de los aeropuertos, cuyas obras, al igual que como ocurrió con las de los estadios, sufren graves atrasos.
El ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, afirmó hoy que el país está preparado “para enfrentar situaciones de manifestaciones, sea de garantía de la libertad de manifestación, sea para evitar que ocurran abusos”.
Según el ministro, es “absolutamente normal” que haya manifestaciones, pero aclaró que el gobierno no aceptará que éstas se utilicen para cometer actos ilícitos.
Por su parte, Rousseff volvió a garantizar que los aeropuertos están preparados para recibir a los millares de turistas que visitarán el país durante el certamen.
“Garantizo que nuestros aeropuertos están preparados para la Copa del Mundo. Vamos a recibir a todos muy bien, y los brasileños podrán estar orgullosos del Brasil que estamos construyendo”, dijo Rousseff en su programa radial semanal “Desayuno con la presidenta”.
Destacó el incremento de la capacidad en varias terminales aéreas como la de Galeao, en Río de Janeiro, donde aumentó “en casi 80 por ciento la capacidad de atención de los pasajeros” y el de la ciudad de Cuiabá, donde dicha capacidad “se va a cuadruplicar”.
Al respecto, el portal G1 de la red Globo recordó que la terminal aérea de Cuiabá presenta serios atrasos en las obras de ampliación, por lo que no estará terminada para la cita deportiva, y que fue catalogada como la peor del país, según la última encuesta realizada por el ente que administra los aeropuertos, Infraero.
La semana pasada un ejecutivo de la empresa Aeroportos Brasil, concesionaria que administra el aeropuerto internacional Viracopos, localizado a 90 kilómetros de Sao Paulo, confirmó que dicha terminal no recibirá pasajeros durante el Mundial debido a los retrasos en las obras. Asimismo, el diario “Zero Hora” informó este fin de semana que ninguno de los aeropuertos de las 12 ciudades sede del Mundial estará totalmente listo para la cita.