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Oakland/dpa
Los Golden State Warriors mantuvieron con vida su superlativa temporada al consumar una histórica remontada ante Oklahoma City Thunder y clasificarse por segundo año consecutivo para las finales de la liga norteamericana de baloncesto NBA, donde se medirán con los Cleveland Cavaliers.
Stephen Curry, MVP de la liga, anotó seis de sus 36 puntos en los últimos 78 segundos del emocionante duelo disputado en la noche del lunes en Oakland y lideró una vez más a su equipo a la victoria por 96-88 en el séptimo y último partido de la serie final de la Conferencia Oeste.
«Steph tuvo un playoff complicado con su lesión de rodilla», advirtió su entrenador, Steve Kerr. «Pero este séptimo partido demuestra lo que es él».
Los Warriors, actuales campeones, marcaron un récord histórico en la temporada regular al ganar 73 de los 82 partidos, pero estuvieron a punto de ser eliminados ante los Thunder, que llegaron a mandar 3-1 en la serie y acabaron perdiendo por 4-3.
Sin embargo, demostraron su jerarquía convirtiéndose en el décimo equipo en toda la historia de los playoff que es capaz de levantar ese marcador adverso.
«Hace unos días estábamos 3-1 abajo y todo el mundo pensaba que descarrilábamos», dijo Curry. «Pero en nuestro vestuario estábamos positivos: ‘Arreglémoslo, busquemos el modo de meternos otra vez en la serie y a ver qué pasa’. En los últimos tres partidos pensamos de ese modo».
«Sabíamos que estábamos a punto de hacer algo muy especial», añadió. «Y remontar un 3-1 lo fue».
Lo mismo dijo el alero Draymond Green: «Nadie vio nunca un equipo con 73 victorias perdiendo 3-1. Nadie tuvo ninguna duda de que podíamos arreglarlo».
Las finales ante los Cavaliers de Lebron James empezarán el jueves. Cleveland se deshizo de los Toronto Raptors en el Este en seis partidos.
«Ahora tenemos 48 horas para prepararnos para el primer partido y lograr cuatro victorias más», dijo Curry, gran estrella de la NBA, tras la remontada.
Los 27 puntos de Kevin Durant y los 19 de Russell Westbrook, que además dio 13 asistencias, no sirvieron de nada a los Thunder, que desperdiciaron tres «match points» para meterse por primera vez en las finales de la NBA desde 2012.
«Definitivamente es una derrota que duele», admitió Durant.
Oklahoma llegó a mandar por 13 puntos antes de irse con una ventaja de 48-42 al descanso, pero los Warriors respondieron en un decisivo tercer cuarto en el que, con seis triples incluidos, hicieron un parcial de 29-12 y pusieron el marcador 71-60 a su favor.
En el último cuarto, Oklahoma trabajó hasta acercarse 82-77, pero Klay Thompson, que terminó con 21 puntos, y Green anotaron otros dos triples seguidos y Curry una canasta simple para abrir el hueco a 90-79 con 3:10 minutos por jugar.
Los Thunder volvieron a acortar la distancia a cuatro puntos a 1:40 del final, pero de nuevo apareció Curry para enloquecer al estadio con tres tiros libres y su séptimo triple de la noche.
