En la revista ECA, thumb No. 588, tadalafil de octubre de 1997 se lee: “El 3 de julio de 1989, la Cruzada Pro Paz y Trabajo publicó una carta abierta al entonces presidente Cristiani (Alfredo) en donde reclamaba la captura y el juicio sumario de, entre otros, los sacerdotes Ignacio Ellacuría y Segundo Montes, y los culpaba de “toda la destrucción de la infraestructura y de todos los viles y cobardes asesinatos que han cometido en nombre de la teología de la liberación”. Al día siguiente, el entonces Viceministro de Seguridad Pública, coronel Inocente Orlando Montano, acusó a la UCA de valerse de espacios pagados “para tratar de desprestigiar a la Seguridad Pública y a la Fuerza Armada”. Días después, siete bombas fueron colocadas en la imprenta de la UCA, que causaron cuantiosos daños materiales.”.
La revista Envivo Digital, al enumerar los tropiezos que tuvo las Naciones Unidas de parte de la extrema derecha salvadoreña en el proceso de Diálogo y Negociacón con el Gobierno y la exguerrrilla, expresa: “La “Cruzada pro Paz y Trabajo”, el “Frente Femenino Salvadoreño” y el “Comité El Salvador Libre”, organizaciones fantasmas de la extrema derecha, expresaron idénticas posiciones en torno al 17 de octubre, fecha acordada para la desmovilización del Batallón contrainsurgente Atlacatl. Le exigían al presidente Cristiani no sólo “mantener el no” a la recalendarización, sino también no desmovilizar el Batallón Atlacatl”.
Con las citas anteriores queremos refrescarle la memoria a los y las lectoras de Diario Co Latino, que nos leen en la versión impresa o en la digital, los antecedentes del grupo autodenominado Pro Paz y Trabajo, que interpuso un recurso de inconstitucionalidad, que ha sido admitido por la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, para impedir que el Presidente de la República Mauricio Funes, hasta mañana presidente Constitucional de la República, sea juramentado en el Parlamento Centroamericano (PARLACEN).
La Cruzada Pro Paz y Trabajo fue fundada el 10 de diciembre de 1979, como uno de los grupos de derecha que apoyaba a las organizaciones paramilitares vinculadas con el Mayor Roberto d´Abuissón, responsable del asesinato de Monseñor Oscar Arnulfo Romero.
La cruzada, al igual que otras organizaciones que fueron los grupos embrionarios de ARENA, festejaron el magnicidio de Monseñor Romero.
Pues este grupo es el que se ha propuesto, utilizando la Sala de lo Constitucional de la CSJ, impedir que el Presidente Funes se convierta en diputado centroamericano, lo que indica que es el que encabezará toda una persecución contra Mauricio Funes cuando ya no sea presidente ni parlamentario.
Por los antecedentes del grupo, debería causar temor, no obstante, el hecho de que haya acudido a la Sala de lo Constitucional, ya es un avance, pues significa que las formas como actuaban en el pasado estan descartadas. Ojalá así sea.
Ojalá, también, y los magistrados constitucionales, por darle una lección a Funes, no vayan a atentar contra el organismo político de la integración centroamericana.