PrRaúl Palacios
¡No!… Solos… ¡no!…
Si eres un militante de ARENA o militante del FMLN y crees que hacer una lucha en común desde sus propias trincheras contra Nayib Bukele y su “Mara Bukeliana”, debe ser de forma separada, entonces tu pensamiento y conducta coherente a ese espíritu de lucha es dañino para el deber social que las personas jurídicas y naturales deben tener, y, les es imperativo, para responder ante su pueblo a sus necesidades fundamentales de trabajo, vivienda y alimentación.
Por encima de nuestros intereses personales o de organización deben tener prioridad los intereses nacionales.
Nuestra joven democracia nacida en 1992 está amenazada de muerte por un mentecato que cree que democracia es ser un fiel seguidor de él, que le den poder, para mantenerse administrando los intereses del Estado de El Salvador, y convertirse de un simple aburguesado a uno más de la oligarquía nacional.
Ya es tiempo que entiendan y se den cuenta que es absurdo y demasiado tonto que ARENA y el FMLN tengan establecidos en sus estatutos obsoletos, que entre ellos nunca debe haber convergencia de intereses y menos de afinidad en la lucha contra un enemigo en común que amenaza su propia existencia.
Ser de derecha o de izquierda, ideológicamente, es propio de sus convicciones doctrinarias politicamente adoptadas por su formación personal, para enfrentarse a la sociedad y salir adelante en sus objetivos de desarrollo personal, pero con un fundamento social, que de prioridad al bienestar de la nación que es el deber de todos sus nacionales.
Se debe tener el derecho a la libre asociación y cada quien inclinarse en su afinidad o pertenencia política a la derecha o la izquierda, que en El Salvador están representadas en El FMLN a la izquierda, y a la derecha ARENA, PDC, GANA, PCN, FRP, NI.
Ambos partidos políticos, ARENA y EL FMLN, están en la obligación de luchar obligatoria y arduamente por salvar nuestra democracia ante la feroz embestida bukeliana.
El resto de partidos políticos que ya tomaron posición a favor de la democracia o a favor de la Mara Bukeliana realizarán su papel correspondiente.
Quienes desde la sociedad civil han pretendido imponer a sus candidatos en el próximo evento electoral han caído en un grave error político, pero deben ejercer cívicamente el rol que la actual coyuntura social y política les está mostrando y haber hecho no una imposición, sino una propuesta de fórmulas presidenciales potables al pueblo de El Salvador y al final decantarse y apoyar a úna sola y única fórmula que podrá derrotar el fraude oficialista ya puesto en marcha.
ANTE LA DEMOCRACIA SALVADOREÑA AMENAZADA DE MUERTE, EL DEBER DE LOS BUENOS SALVADOREÑOS ES DEFENDERLA… ¡HASTA CON LA VIDA!.