Wellington / AFP
Más de 40.000 personas, una cifra récord, se manifestaron el viernes frente al Parlamento neozelandés para reclamar políticas contra el cambio climático, en el marco de una huelga mundial por el clima.
El 20 de septiembre, más de cuatro millones de personas, incluyendo muchos jóvenes, tomaron las calles de todo el mundo como parte del movimiento de los «Viernes por el futuro», lanzado hace cerca de un año por la joven activista sueca Greta Thunberg, consistente en hacer huelga los viernes para exigir medidas contra el calentamiento global.
Niños de uniforme, adolescentes y excombatientes desfilaron por las calles de Wellington este viernes, con pancartas en las que se leían lemas como «Faltamos a clase para DARLES una lección» o «Negación=muerte» o «Lo que diga Greta», en alusión a a la intervención de Thunberg el pasado lunes en la ONU.
La sueca, que este viernes participará en la huelga mundial en Montreal, lanzó un potente «¿Cómo se atreven?» a los dirigentes mundiales.
A sus 13 años, James Capie afirmó que comparte la indignación de Greta Thunberg y aseguró que su generación continuará manifestándose el tiempo que haga falta.
«La gente tiene derecho a estar enfadada. Mi generación no debería faltar a la escuela», subrayó, en medio de una protesta organizada en Wellington.
«Para mí, es muy importante que estemos aquí para protestar contra las otras generaciones, que arruinaron verdaderamente nuestro planeta», consideró el adolescente.
Michael Alspach, de 37 años, participó en la marcha junto a Ella, su bebé de 17 meses, y afirmó que no sería capaz de mirar a su hija a los ojos si no hubiera hecho todo lo posible para garantizar su futuro.
«Para mí, las cosas no deberían ir demasiado mal, para ser honesto, pero ella tendrá 80 años en 2100, y para entonces las previsiones son muy malas, así que lo hago por ella», explicó.