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A través de un comunicado de prensa, el influyente senador de los Estados Unidos Patrick Leahy enfatizó en que las decisiones tomadas por el presidente Nayib Bukele y la Asamblea Legislativa relacionadas a la destitución de magistrados de la Corte Suprema de Justicia y el Fiscal General de la República, “tienen consecuencias en las relaciones entre Estados Unidos y El Salvador”.
En el comunicado de prensa, Leahy explica: “Tienen consecuencias en nuestros programas de ayuda y en nuestro apoyo para financiar a El Salvador a través del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BM)”.
El senador estadounidense también planteó que las decisiones tomadas por el presidente de la República afectan en las relaciones comerciales entre ambas naciones y en la emisión de visas. “Esto no es un tema de soberanía nacional e interferencia extranjera, como el presidente Bukele ha sugerido falazmente”, asevera el senador en su comunicado de prensa.
Por lo que reafirmó que “las acciones afectan directamente a Estados Unidos, a las corporaciones estadounidenses, a las relaciones comerciales y al bienestar de millones de salvadoreños en Estados Unidos, así como en El Salvador”.
Leahy enfatizó en que Estados Unidos es el principal socio comercial de El Salvador, y su principal donante, lo que ejemplificó con las condiciones generadas por el Tratado Centro Americano de Libre Comercio (CAFTA, por sus siglas en inglés) que estableció preferencias comerciales y nuevos estándares laborales, sanitarios y ambientales.
De igual forma, Leahy mencionó que alrededor de tres millones de salvadoreños viven en Estados Unidos, de los cuales 200 mil se han beneficiado por el Estatuto Temporal de Protección (TPS, por sus siglas en inglés).
“La comunidad salvadoreña en Estados Unidos envía $6 billones por año en remesas a sus parientes en El Salvador, lo cual representa el 25 por ciento del PIB del país”, dijo Leahy, en el comunicado de prensa.
En términos de donaciones, el senador detalló que solo en los últimos cinco años, Estados Unidos proveyó a El Salvador más de $700 millones en asistencia a través de USAID, Millennium Challenge Corporation y otras agencias. “Buena parte del progreso logrado con estos fondos está en riesgo de perderse”, aseguró Leahy.
Ante esta situación, Leahy se sumó a quienes tanto en Estados Unidos como en El Salvador exhortaron al presidente Bukele y a la Asamblea Legislativa a reconsiderar sus acciones inconstitucionales y restaurar la separación de poderes y el Estado de derecho.
“No destruyan los logros más importantes de los Acuerdos de Paz. Terminen con los ataques contra el Estado de derecho, respeten los periodos constitucionales de los otros jueces y del Procurador de los Derechos Humanos, y nombren nuevos jueces en la Sala de lo Constitucional y un nuevo fiscal general, a través de los procesos establecidos y garantizando que estas importantes autoridades cuenten con un récord de integridad, independencia y las calificaciones necesarias para tales puestos”, externó Leahy.
Para el senador estadounidense, la decisión de destituir al fiscal general de la República “genera serias dudas sobre la futura independencia de la Fiscalía”. De igual forma, mencionó que, previo a su destitución, el fiscal general Raúl Melara investigaba con el apoyo de los Estados Unidos una serie de casos de corrupción que implican a altos funcionarios gubernamentales, incluyendo un caso de lavado de dinero.
