Redacción Nacionales
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Con el objetivo de evitar incrementos injustificados, por el acaparamiento de productos de la canasta básica, el presidente de la Defensoría del Consumidor, Ricardo Salazar, junto al ministro interino de Agricultura y Ganadería, Óscar Guardado, ejecutaron una inspección de precios e inventarios de maíz y frijol, ubicados en la calle Gerardo Barrios, en el centro de San Salvador.
“Estamos constatando las existencias y los niveles de precios de productos de la canasta básica como el frijol, arroz y maíz. A la fecha hemos realizado 2,659 verificaciones en la cadena de suministros”, detalló el presidente de la Defensoría, y enfatizó que la vigilancia se realiza bajo el objetivo de cuidar el bolsillo de los salvadoreños en las principales calles del centro de San Salvador donde las familias salvadoreñas suelen comprar sus productos.
El titular comentó que han activado el requerimiento de información a 50 comerciantes, y han sido presentados 107 casos ante el Tribunal Sancionador, 46 ya fueron sancionados desde el inicio de las medidas de alivio económico impulsadas para paliar los efectos de la inflación mundial.
Mientras que el representante de Agricultura y Ganadería afirmó que “existe abastecimiento a escala nacional, y destacó que la cosecha 2022-2023 será la más grande de la historia del país, la proyección es de 22.7 millones de quintales de maíz”.
En contraste, el Centro para la Defensoría del Consumidor (CDC) aseguró el año anterior que los precios de los granos básicos incrementarían este año debido a la baja producción, ya que los agricultores no producirían para comercializar, sino para asegurar el consumo, y reveló que el ciclo agrícola 2022-2023 dejaría 8.4 millones de quintales de cereales menos, impacto que se sumaría al alto precio de la canasta básica que pasó de $129.74 a $220.95, según informes emitidos en 2022.