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@JennyCoLatino
Diversas delegaciones de alto nivel arribaron desde ayer al país para participar, medicine en representación de sus naciones, medicine en el acto de beatificación de monseñor Óscar Arnulfo Romero.
Entre las primeras personalidades en pisar suelo salvadoreño estuvo el vicepresidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, quien arribó en horas de la tarde de ayer al Aeropuerto Internacional y posteriormente se desplazó a Catedral Metropolitana para colocar una ofrenda floral en la cripta donde yacen los restos mortales del obispo mártir.
“Agradecemos el recibimiento y nos sentimos honrados de estar en El Salvador en ocasión de la beatificacion de monseñor Romero”, dijo el vicepresidente de Cuba.
Asimismo, llegó, esa misma tarde, el primer vicepresidente de Costa Rica, Helio Fallas; así como el viceprimer ministro de Belice, Gaspar Vega.
Los altos funcionarios fueron recibidos con honores por la viceministra de salvadoreños en el exterior, Liduvina Magarín.
Ya esta mañana tocaron tierras cuscatlecas otras personalidades como el presidente de Ecuador, Rafael Correa, quien desde hace varias semanas había confirmado su participación, así como el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela; el jefe de Estado de Honduras, Juan Orlando Hernández y su homólogo de Guatemala, Otto Pérez Molina.
También, desde el sur de América se desplazó hasta el terruño de monseñor Romero, el vicepresidente boliviano, Alvaro García Linera.
Presidente Correa asiste a la beatificación de Monseñor Óscar Romero
A las 08:40 (hora de El Salvador), aproximadamente, arribó el presidente de la República de Ecuador, Eco. Rafael Correa, a la capital del país centroamericano para acompañar a la ceremonia de beatificación del Monseñor Óscar Romero.
El acto, al que el Primer Mandatario ha llamado como un “reconocimiento justo”, será en la capital y tendrá entre sus asistentes a autoridades como el presidente del país anfitrión, Salvador Sánchez Cerén.
Un 24 de marzo de 1980, durante la homilía que impartía en la capilla del hospital de La Divina Providencia, murió tras un disparo ejecutado por un francotirador que integraba un escuadrón de la muerte de la dictadura militar. Luego de una corta agonía, en medio de los primeros auxilios, falleció.
“Los mártires de América Latina jamás eran reconocidos”, dijo el Jefe de Estado y recordó la lucha por los derechos humanos que mantuvo Romero y que dio como consecuencia su asesinato.
“A mí me inspira mucho, la vida, el sacrificio y la autenticidad, el martirio, un gigante de la historia Latinoamericana”, dijo el Jefe de Estado.
Luego de la misa campal, que se desarrollará en la Plaza El Salvador del Mundo, Correa hará una ofrenda floral en la cripta donde está sepultado el Monseñor Romero, ubicado en la Catedral Metropolitana de San Salvador.
El cardenal Angelo Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos de la Santa Sede, presidirá la ceremonia de beatificación de Monseñor Romero.
Romero, quién fue uno de los militantes de la Teología de la Liberación, es considerado como uno de los diez mártires del siglo XX representados en las estatuas de la abadía de Westminster, en Londres. Fue nominado al Premio Nobel de la Paz en 1979.
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