Telesur
Efectivos de la policía y el ejército guatemalteco reprimieron y contuvieron este domingo, en el departamento fronterizo de Chiquimula a la caravana de emigrantes proveniente de Honduras, la cual que se dirige a Estados Unidos.
A diferencia del viernes, cuando la policía iba desarmada y no contuvo el ingreso de la caravana por el paso fronterizo de El Florido, esta vez las fuerzas de seguridad enfrentaron a los emigrantes con gases lacrimógenos y granadas ensordecedoras.
Desde la noche del sábado, los migrantes están varados en este punto del oriente guatemalteco, debido a la accidentada geografía de la región. Según cifras de la Policía Nacional, han ingresado a Guatemala entre 6.000 a 9.000 personas.
Por su parte, este sábado, el Ministerio de Salud de Guatemala informó desde su cuenta oficial de Twitter que “personal de Áreas de Salud de dicha institución” dan atención médica “en los seis Centros de Atención al Migrante ubicados en las distintas rutas que utilizan las personas Migrantes para desplazarse en el país”.
Los migrantes hondureños buscan escapar de la pobreza, la violencia, el desempleo, falta de educación y salud, lo que se agravó con la pandemia de coronavirus y el azote de dos huracanes en noviembre.