Moscú/Rusia/AFP
España y Portugal iniciarán con fuerza el Mundial de Rusia con un choque el 15 de junio, que debería marcar el devenir de un Grupo B lleno de conocidos, con el Irán del portugués Carlos Queiroz, y el Marruecos de Hervé Renard.
Cuando el azar determinó el emparejamiento de los dos últimos campeones de Europa en el mismo grupo mundialista, los focos se centraron en Cristiano Ronaldo, que tendrá que enfrentarse a sus compañeros del Real Madrid (Sergio Ramos, Isco…) y sus habituales rivales barcelonistas como Gerard Piqué o Andrés Iniesta. Portugal, ganador de la Eurocopa-2016 bajo la batuta de Fernando Santos, acumula sangre nueva en torno a su gran estrella, pero la ‘Roja’ también llega rejuvenecida y sin conocer la derrota en los 18 partidos jugadores desde que Julen Lopetegui fue nombrado seleccionador en 2016.
“Son jugadores muy completos en lo técnico, lo físico, táctico. Es una muy buena mezcla que evidentemente nos va a obligar a hacer un magnífico partido”, advertía Lopetegui.
Este derbi ibérico en Sochi, al día siguiente de la inauguración del Mundial, debería a priori determinar la clasificación del Grupo B… Pero, cuidado, no obstante, con Irán, que llega a la cita rusa sin sufrir ninguna derrota en la fase de clasificación de la zona asiática.
“Irán es el mejor equipo de Asia de largo en los últimos seis años”, afirma Lopetegui, que recuerda lo que sufrió Argentina para ganarle 1-0 en Brasil-2014. La estabilidad le está dando fruto a la selección iraní, entrenada por Queiroz desde 2011. A sus 65 años, el técnico luso es un viejo conocido de la Seleçao a la que dirigió entre 2008 y 2010, y de los españoles, tras entrenar al Real Madrid (2003-2004). Marruecos, por su parte, se la jugará primero entre bastidores con su candidatura para organizar el Mundial de 2026, cuya atribución se decide el 13 de junio. Dos días más tarde, los ‘Leones del Atlas’ jugarán en San Petersburgo contra Irán.
“Tendremos que ser inteligentes y estar bien técnicamente, es un paso más respecto lo que podemos jugar en África”, consideró el seleccionador Hervé Renard, ganador de dos CAN.
Enfrentarse después a Portugal y España, dos países cercanos a Marruecos por geografía e historia, también tendrá su gran carga simbólica para los marroquíes, que a priori, aparecen como los tapados de este grupo.