Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
En el informe anual de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para el 2022, resaltó el compromiso y los desafíos en materia de derechos humanos y democracia en la región, que contiene además, datos de su gestión y detalles de avances y retos relevantes en derechos humanos de los Estados miembro.
“El Informe Anual es un referente regional de interés público interamericano para comprender los desafíos en derechos humanos que viven y enfrentan las personas en las Américas y el Caribe, el cual contribuye a que los Estados y distintos actores de la región sumen esfuerzos para promover la vigencia de los derechos humanos en el hemisferio”, dijo Margarette May Macaulay, presidenta de la CIDH.
El documento cuenta con 6 capítulos, del cual, el primero está referido a las actividades de la Comisión (CIDH), junto a la aprobación del nuevo “Plan Estratégico 2023-2027; que es la hoja de ruta que orienta la gestión institucional en los próximos años, que fue elaborado con una amplia participación y cercano diálogo con la comunidad interamericana y la implementación de mecanismos de seguimiento de recomendaciones y decisiones, compila el primer capítulo.
El capítulo II trata sobre el acceso a la justicia interamericana, y da cuenta del trabajo del sistema de peticiones, casos, medidas cautelares y la labor y rol de la Comisión ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) .
En el informe destaca los avances y se menciona la implementación de 134 medidas relacionadas con 50 acuerdos de solución amistosa y el cumplimiento total de 67 medidas de reparación. Así como, el cumplimiento total de 9 acuerdos de solución amistosa que fueron adoptados en Informes de Fondo.
Para la CIDH estos resultados “impactan de manera positiva en el acceso a la justicia interamericana” por lo que la implementación de políticas y otras medidas de no repetición es considerado un logro. Solo en el año 2022, la CIDH, participó en el mayor número de audiencias ante la Corte IDH, con un total de 52 y presentó también a este tribunal 312 escritos jurídicos sobre casos activos en trámite o supervisión.
Con respecto a las “medidas cautelares”, la CIDH logró el cierre del año, habiendo concluido el trámite de todas esas solicitudes que fueron registradas el año pasado y logró garantizar al menos una acción de supervisión en 100% de las medidas cautelares vigentes.
De las 1,033 solicitudes de medidas cautelares la CIDH logró evaluar el 97.09% , y otorgar ampliar 50, que permitieron la protección de más de 1,648 personas y colectivos identificables. Además, emitieron 5 resoluciones de seguimiento a medidas cautelares vigentes, se levantaron totalmente 43 y 3 parcialmente, alcanzando un total de 80 resoluciones sobre medidas cautelares. Y destacan la presentación de 4 solicitudes de medidas provisionales a la corte IDH; 92 escritos jurídicos y 5 observaciones orales en audiencias ante la Corte IDH.
Sobre el capítulo III, en cuanto al mandato de “monitoreo y promoción de derechos humanos” la CIDH compiló que esas actividades de las relatorías temáticas y de país, de promoción y capacitación, lograron alancazar a 40 mil personas y capacitar a más de 7 mil en tareas de promoción de una cultura de derechos humanos.
Asimismo, incluyeron los grupos en situación de discriminación y vulnerabilidad histórica, que resaltaron como “desafíos regionales” en la situación de personas en movilidad humana, las graves condiciones que enfrentan las personas privadas de libertad, y la persistencia de la discriminación y violencia contra las mujeres, personas mayores, personas con discapacidad, población LGBTI, afrosdescendientes , indígenas y niñas, niños y adolescentes.
El capítulo IV presenta un panorama completo de las observaciones y desafíos de derechos humanos, así como las tendencias regionales en derechos humanos con los avances y retos que tienen los 35 Estados miembros de la OEA, en los ejes transversales: institucionalidad democrática y en derechos humanos, independencia judicial y acceso a la justicia, seguridad ciudadana, igualdad de género y diversidad e interculturalidad.
En cuanto al IV capítulo, la CIDH expresó su preocupación por las tendencias identificadas como debilitamiento de la institucionalidad democrática, de la independencia judicial de las instituciones nacionales de derechos humanos, y de la confianza social en las instituciones estatales, el cierre de espacios democráticos y la violencia, criminalización contra personas defensoras y periodistas en algunos países.
“El informe anual de la CIDH visibiliza el trabajo de las Secretaría Ejecutiva para la defensa y promoción de los derechos humanos en el hemisferio, que constituye una herramienta de transparencia institucional y a la vez un referente que, al identificar los desafíos que tiene la región en la materia ofrece a los Estados un punto de partida para hacer frente a los mismos, con medidas concretas e integrales”, subrayó, Tania Reneaum Panszi, secretaria ejecutiva de la CIDH.
La Comisión de la CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región a partir de la Carta de la OEA y de la Convención Americana de Derechos Humanos.