Cecilio Ignacio García
La nota del día son los despidos masivos en el Gobierno Central, justificados por relaciones familiares, de consanguinidad o afinidad, aunque en muchos casos los despedidos entraron al sector público antes de que sus familiares fueran funcionarios; también por acusaciones políticas partidarias o por supresión de unidades administrativas del Órgano Ejecutivo sin prever la situación de los trabajadores de esas unidades. En todos los casos sin el debido proceso.
Actúan como las dictaduras del tiempo del PCN con el brazo paramilitar de ORDEN, que señalaban opositores y luego amanecían muertos. Solo acusaban de subversivos o comunistas y eran condenados arbitrariamente. Hoy en cada ministerio, acosan a cada empleado para elaborar listas de personas delatadas por sus mismos compañeros; acusados de ser de un partido o familiar de un político. Son supuestamente, subversivos del régimen actual.
Podría pensarse que Nuevas Ideas ya está en campaña electoral para las elecciones parlamentarias, así lograr mayoría absoluta y lograr leyes represivas laborales o de oposición. Sin embargo, hay cosas más graves.
Diferentes personalidades, analistas políticos y hasta empresarios están manifestándose preocupados por esta conducta, que consideran tiene rasgos de un régimen autoritario y autocrático.
CONCLUSIÓN
Los responsables de los despidos, pueden ser acusados de cometer delito de actos arbitrarios, TANTO el superior que dio la orden ilegal, como el que la obedeció sin estar obligado a ello. Hay incumplimiento del Estado de Derecho.
Lo mejor para el presidente de la República, sus ministros y demás funcionarios subalternos es que desistan de esta conducta arbitraria o tendrán un mayor desgaste político en los primeros días de su gobierno. Tienen que caer en la cuenta que la gestión del sector público, no es como en la empresa privada.
Las arbitrariedades cometidas solo nos llevan a un RETROCESO de la Democracia Representativa en nuestro país, que ha costado tantas vidas humanas.