Rosario Rivas
@Diario Co Latino
Las madres tienen un día especial de celebración, este 10 de mayo, y en El Salvador se reconoce la labor incansable e invaluable de esas abnegadas mujeres que se echan sobre los hombros el criar, formar y amar sobre todas las cosas a sus hijos.
Hay que recordar que el Día de la Madre es un homenaje que se celebra en honor de las madres, en todo el mundo, pero en diferentes fechas del año según el país, para reconocer el aporte de las mujeres en la difícil tarea de ser “mamá”.
Sin embargo, es de destacar que ellas son “mamás” los 365 días del año y las vemos en las calles vendiendo y a la par o sobre las carretas de frutas u otros productos que ofrecen a viva voz cargando a sus pequeños.
O también llevándolos a la escuela, cocinándoles, lavando la ropa y hoy en tiempos de pandemia hasta se han convertido en maestras sustitutas.
Otras madres se convierten en las cuidadoras por siempre de hijos o hijas que nacen con alguna discapacidad, por lo que también son enfermeras, psicólogas, fisioterapistas entre otros instrumentos de ayuda para hacer más fácil la vida de sus vástagos aunque el sacrificio sea el doble.
En fin estos son solo ejemplos, porque hay miles.
En las calles de San Salvador, este domingo 9 de mayo, se observó a Beatriz Argueta, de 19 año, junto a su hija Génesis, espera bajo el sol que las personas pasan por el lugar y le compren tasas decoradas, en homenaje al día de la madre.
En otro tramo de la calle tres generaciones se han unido para ofrecer también bonitos regalos en homenaje a la mamá y mientras la madre, hija y nieta saborean de un suculento bocadillo esperan que las ventas sean mejor que el año pasado. Aunque hay muy poca presencia de compradores.
En otro extremo de la ciudad, este domingo previo a la celebración, se colocaron flores y adornos en la entrada principal del cementerio la Bermeja, en espera de que familiares lleguen al lugar y compren para recordar a la madres que ya partieron de este mundo terrenal.