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Liliana Martínez-Scarpellini
Los ángeles/dpa
El Día de la Madre es una ocasión perfecta en Hollywood para arrojar a la cartelera un producto comercial y entretenido con unas cuantas caras conocidas como “Día de la Madre”, generic con Jennifer Aniston, Kate Hudson, Jason Sudeikis y Julia Roberts, dirigidas por Gary Marshall.
Se trata de una comedia moderna un tanto inconexa, con escenarios entrelazados que no terminan de enganchar y que en algunos casos dejan entrever el ocaso de algunos intérpretes como Aniston, la eterna víctima de Hollywood por su vida personal que ya no tiene la frescura de antaño.
En esta comedia hace de una madre ya madurita acostumbrada a los avatares del divocio, que tiene que soportar la relación de su ex marido -interpretado por Timothy Olyphant- con una mujer mucho más joven y notablemente atractiva (la muy popular en redes sociales Shay Mitchell).
Sudeikis, por su parte, hace el papel de un hombre casado con hijos que ha perdido a su mujer y que trata de hacer los dos papeles en casa mientras se plantea volver a salir con mujeres.
Julia Roberts es otra madre, aunque tarda un tiempo en reconocer que abandonó a la joven que aparece para reclamarle un reencuentro. Y Kate Hudson interpreta a una mujer casada con un indio sin habérselo confesado a su madre, una mujer texana muy conservadora.
La historia es una trama de enredos que suceden en vísperas del Día de la Madre y con el significado especial que tiene para todos ellos, de una forma o de otra. Todo ello con un reparto plagado de estrellas que han coincidido en señalar que se decantaron por un producto tan “light” a estas alturas de su carrera por el simple hecho de haber podido trabajar con un director como Marshall, responsable de hits populares como “Pretty Woman” y “Frankie and Johnny”. En realidad, este título podría considerarse como una especie de trilogía, puesto que sus dos anteriores películas tenían también que ver con fechas señaladas en el calendario, “New Year’s Eve” en 2011 y “Valentine’s Day” en 2010, filmes con una estructura similar, comedias románticas con un amplio reparto para ir contando distintas historias e irlas conectando de alguna manera, todas con estructuras con las que el público en general se suele identificar.
“Cuando trabajas como director, a veces encuentro un nicho. Yo hago comedias románticas y vacaciones”, explica, siempre fiel además a la gente con la que ha colaborado en el pasado y que le da buen resultado. “Yo he estado casado 52 años”, dice el director de 81 años, todo un veterano de la industria.
“Me gusta aferrarme a gente que trabaja bien conmigo. Hay al menos siete personas en la película que se remontan a los tiempos de ‘Pretty Woman’. Hace 26 años que la hicimos y todavía estamos juntos”. Es una ventaja añadida puesto que conoce a esas personas y no tiene que invertir tanto tiempo en manejarlas, como es el caso de Julia Roberts, una de las 36 grandes estrellas que han trabajado con Marshall a lo largo de su carrera, 14 de ellos ganadores o nominados a un Oscar de la Academia de Hollywood.
Precisamente fue esa amistad con Roberts la que ayudó a los productores a conseguir al resto del reparto. Una que vez que la protagonista de “Erin Brokovich” dijo que sí, se unieron Kate Hudson, Jennifer Aniston y Jason Sudeikis, un abonado a las comedias pese su último papel en “Race”.
Y aunque no es ni mucho menos la mejor de las películas de Marshall, es una fórmula que sigue teniendo tirón entre un amplio sector de público, siempre con el humor característico del director y con algunas pinceladas que la hacen llevadera.
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