La Conferencia General de la UNESCO en su Resolución 31C/20 decide proclamar el día 10 de noviembre Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo en el año 2001. El Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo es un evento anual celebrado en todo el mundo para recordar el compromiso asumido en la Conferencia Mundial sobre la Ciencia, que se celebró en Budapest en 1999, bajo el auspicio de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y el Consejo Internacional de Uniones Científicas (CIUC).
Su propósito es renovar el compromiso, tanto a nivel nacional como internacional, en favor de la ciencia para la paz y el desarrollo, y hacer hincapié en el uso responsable de la ciencia para el beneficio de las sociedades, en particular para la erradicación de la pobreza. El día mundial también tiene por objeto lograr una mayor concienciación en la opinión pública sobre la importancia de la ciencia y colmar la brecha existente entre la ciencia y la sociedad.
El lema para este año 2019 es “La ciencia abierta, no dejar a nadie atrás”. La celebración del día en este 2019 hace hincapié en el concepto de “ciencia abierta”, no solo en el sentido de apertura para la comunidad investigadora, sino que se refiere a una ciencia abierta en cuanto a ciencia accesible a la sociedad.
En la actualidad, a pesar de los progresos conseguidos en los últimos años, todavía existen grandes disparidades entre y dentro de las diferentes regiones y los diferentes países cuando hablamos de acceso a la ciencia, la tecnología y la innovación (CTI) y del disfrute de sus beneficios. La “ciencia abierta” puede ser un paso fundamental para abordar estas disparidades y cerrar las brechas existentes de la CTI.
Acercar la ciencia a la sociedad es fundamental para que los individuos tengan los conocimientos necesarios, y de esta forma puedan elegir sus opciones profesionales, personales y políticas. Además, sirve para atraer a los ciudadanos hacia el apasionante mundo de la investigación.
Este día es importante para hacer un llamado a todos los sectores de la sociedad salvadoreña para que se haga un mayor esfuerzo para potenciar el desarrollo científico y tecnológico desde las aulas, para que el país pueda promover iniciativas que permitan alcanzar un mayor desarrollo de país, ser más competitivos en un mundo altamente tecnológico y utilizar estas herramientas y metodologías científicas para lograr mejores condiciones de vida de manera sostenible.