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El presidente de Cuba, Miguel Díaz Canel Bermúdez, denunció este miércoles que durante el año 2020 el Gobierno de los Estados Unidos (EE.UU.) recrudeció su inhumana política del bloqueo económico, comercial y financiero contra el país, cuando este carece de justificación política, jurídica y moral, y “continúa siendo el principal obstáculo para el avance de las relaciones comerciales” de la isla con EE.UU.
Durante la clausura del Quinto Periodo de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, el mandatario cubano reafirmó la política imperialista ha ocasionado dificultades para obtener equipos e insumos médicos durante la pandemia de la Covid-19, repercute en gestiones comerciales asociadas a la pandemia, así como en el envío y recepción de ayuda humanitaria. En tanto, aseguró que EE.UU. incrementó la persecución de transacciones financieras, atacó el sector de los viajes incluso antes de cerrar las fronteras cubanas ante la pandemia, impuso restricciones injustificadas y limitó el envío de remesas para cerrar la entrada divisas por vías seguras, legitimas e institucionales.
Díaz-Canel advirtió además que el bloqueo daña el bienestar población cubana así como la capacidad del país para satisfacer las necesidades y la garantía de servicios básicos. Además, castiga a las familias, a los cubanos en el exterior, viola los Derechos Humanos (DD.HH.), dificulta la comunicación, los viajes, las visas y la unificación familiar.
No obstante, resaltó, es tiempo de que el Gobierno estadounidense afronte que si bien esta política unilateral daña al pueblo cubano en su conjunto, “es incapaz de doblegar nuestra capacidad de resistencia”, pues “no logra ni logrará jamás someter a la nación cubana ante el dominio imperialista”.
Asimismo, el titular cubano señaló que durante la pandemia de la Covid-19 en el mundo, la hostilidad del Gobierno estadounidense contra la isla incluyó “el ataque despiadado contra la cooperación médica internacional que presta Cuba”, y ejerció presiones y amenazas contra numerosos países para que rechazaran la ayuda, “alcanzando niveles bochornosos y sin precedentes”.
El presidente Díaz-Canel explicó también que a Cuba la epidemia llegó en conjunción con el bloqueo reforzado, y “no ha habido tregua en esta guerra por desaparecer nuestro ejemplo” de independencia y soberanía de la faz de la tierra”, no obstante, aprendimos que “todos los desafíos pueden ser vencidos”. “Los cubanos estamos demostrando otra vez que sí se puede”, acotó el mandatario, quien posteriormente aseguró que en estos siete meses de “lucha infatigable contra la pandemia, hemos confirmado la capacidad” de la economía planificada y del sistema salud en el control de brotes y “de brindar asistencia segura a toda población, sin diferencias”.
“Un socialismo humano y justo, como no lo ha sido ningún sistema nunca”, reiteró.
Economía y orden institucional del país
El mandatario cubano explicó que a las afectaciones del turismo durante la pandemia se unieron los incrementos de gastos de salud, la interrupción del empleo en áreas productivas y la paralización del trabajo no estatal, no obstante, se ha trabajado en el enfrentamiento a la Covid-19 y la reactivación económica sin renunciar a los programas fundamentales del país plasmados en el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta 2030.
En este sentido, ratificó la voluntad gubernamental de avanzar con determinación para alcanzar mayor nivel de implantación durante lo que resta de año, por lo que dijo, “es preciso acelerar el ritmo y las transformaciones profundas con innovación”.
Mencionó que en este contexto resulta vital que el sistema de empresas implemente las medidas acordadas, que unidas a las facilidad para importar y exportar, así como otras trasformaciones para las formas de gestión no estatal, la implementación de políticas de desarrollo territorial y el ordenamiento monetario, permitirán poseer un “tejido empresarial más interconectado” con mayor “innovación y capacidad”.
En tanto, aseguró que implementar con resultados la estrategia económica y social es la tarea de mayor prioridad de la economía cubana en estos momentos.
Por otra parte, el presidente de Cuba La aprobación señaló que las cuatro leyes recientemente aprobadas aseguran el desarrollo normativo de los preceptos constitucionales de los órganos del Estado y Gobierno y fortalecen el orden institucional del país. Para la aprobación de las leyes del Servicio Exterior; de Organización y Funcionamiento del Consejo de Ministros; de Revocación de los Elegidos a los Órganos del Poder Popular, y del Presidente y Vicepresidente de la República, contaron según comunicó con una amplia participación, “experiencia que debemos continuar y perfeccionar”.
