@JoakinSalazar
Las víctimas que son sometidas a esclavitud con fines sexuales, laborales y comerciales de todo tipo, es una de las principales preocupaciones del Gobierno salvadoreño, ante esto la Academia Nacional de Seguridad Pública (ANSP) culminó con una capacitación para 26 elementos de la División Fronteriza de la Policía Nacional Civil (PNC).
“Nos satisface mucho esta capacitación especializada. Miembros de la División Fronteriza que son responsables de la verificación de cualquier delito que puedan pasar por las fronteras salvadoreñas hoy se han capacitado sobre uno de los delitos más graves como lo es la trata y tráfico de seres humanos”, dijo Jaime Martínez, director general de la ANSP.
Martínez agregó que este es uno de los delitos más graves porque vienen de estructuras criminales, de estructuras transnacionales, y como consecuencia es un delito declarado de Lesa Humanidad.
La capacitación fue dirigida a dos inspectores, dos subinspectores, un sargento, seis cabos, una mujer y 15 agentes que incluyen a cinco mujeres, con un total de 26 participantes que recibieron la especialización durante una semana.
Durante la capacitación se desarrollaron contenidos relacionados con la situación actual de la legislación española e internacional, visado Schengen, aplicación normativa a la gestión de fronteras, rutas actuales de tráfico y trata de personas y su modus operandi.
También el abordaje policial de las víctimas, casos prácticos de trata, actuación administrativa con la víctima, control de pasajeros en aeropuertos, verificación operativa de documentos, técnicas y herramientas policiales en la investigación contra la trata, matrimonios de conveniencia y otras conductas.
De acuerdo a las autoridades, “la trata y el tráfico de personas son delitos que se han incrementado en forma alarmante en los últimos años”.
En relación a los términos, el director explicó que la “trata de seres humanos” y “tráfico de migrantes” han sido usados como sinónimos pero se refieren a conceptos diferentes. El objetivo de la trata es la explotación de la persona, en cambio el fin del tráfico es la entrada ilegal de migrantes. En el caso de la trata no es indispensable que las víctimas crucen las fronteras para que se configure el hecho delictivo.