Santiago Leiva
@DiarioCoLatino
El Dragón pasó de la gloria al purgatorio, mientras que el Portland Timbers del infierno al cielo. Los mitológicos no supieron administrar un 1-0, y permitieron que el cuadro de la MLS les remontará 1-2, para llevarse un triunfo sufrido del estadio Cuscatlán. Eso sí, los norteamericanos debieron esperar hasta el minuto 90 para celebrar su continuidad en la pelea por avanzar en la Liga de Campeones de la COCACAF.
La derrota, en el último suspiro del encuentro, impidió que los migueleños se despidieran de forma honrosa del torneo internacional en el cual no registraron ni un triunfo.
Sin nada en juego, el Dragón salió al terreno de juego sin mayor presión de la necesaria, mientras que el Timbers parecía que traía estudiado su libreto. Así, la poca hinchada congregada en las gradas del Cuscatlán fue testiga de un primer tiempo anestésico y carente de emociones fuertes.
El balón no tuvo quien lo administrara con precisión y las llegadas a gol fueron escasas. Al ´7 Diego Valeri probó los reflejos de Henry Hernández. Y los escupe fuego respondieron en el minuto 20 con un zapatazo de Kenroy Howell que el portero Jake Gleeson consiguió desviar.
La jugada más clara para descorchar el festejo se desperdició en los botines de Jack Mcinerney, al ´28, y luego Valeri probó desde el tiro libre, pero su remate se fue apenas desviado. Este disparo cerró la persiana del primer acto.
En la etapa de complemento, la displicencia se mantuvo, pero el encuentro tuvo una leve mejoría luego del gol de Kevin Melara en el ´53. La anotación obligó a los estadounidenses a adelantar líneas y Dragón también se cargó de ilusión, pero no volvió a generar ninguna llegada clara.
Desbocado, pero bien protegido atrás, el Timbers comenzó a apedrear la cueva del Dragón y los frutos llegaron. En el ´73, Raúl González evitó el gol en la línea de gol, y siete minutos después Fernendo Adi logró el 1-1.
El empate aun parecía aceptable, pero los dirigidos por el profesor Nelson Ancheta no lograron aguantar el ritmo final del juego y justo en el ´90 Darlington Nagbe desde un tiro libre chamuscó al Dragón.