Roma / AFP
La policía italiana asestó un duro golpe a la llamada «mafia de los cultivos» de Sicilia especializada en hacerse con los millones de euros para la agricultura de la Unión Europea.
En total, 94 personas fueron detenidas durante un gigantesco operativo, entre ellos los jefes de dos familias mafiosas, un notario, empresarios y funcionarios públicos encargados de las licitaciones para acceder a los fondos.
Desde 2013, la mafia de Tortorici, llamada así por la ciudad situada en una zona montañosa en el noreste de la isla, defraudó por unos 10 millones de euros (11 millones de dólares) a la Unión Europea, precisó la fiscalía de Messina.
Los mafiosos se apropiaban de extensiones de tierra «fantasma» que en realidad estaba en manos de alcaldías, regiones y hasta de un aeropuerto local, para obtener así fondos europeos destinados al desarrollo de la agricultura.
«Lograban obtener subsidios por propiedades que nunca les había pertenecido», explicó el procurador de Messina, Maurizio de Lucia, al margen de una conferencia de prensa celebrada en la localidad de Nebrodi.
«Las dos familias mafiosas lograron un pacto sólido para repartirse fondos de la Unión Europea», explicó el general de cuerpo de carabineros Pasquale Angelosanto.
– Ausencia de controles –
Entre los detenidos figuran funcionarios de la agencia pública para el desarrollo de la agricultura, encargada de asignar los fondos de la UE así como expertos en solicitar ayuda a la entidad internacional.
«Se pedían subsidios donde se podía porque sabían que no había controles», explicó de Lucia.
«Se trata de una gigantesca estafa. Se tenía sólo que controlar. Pero el encargado de controlar era cómplice», resume el diario La Repubblica.
De los detenidos, 48 fueron trasladados a prisión y el resto quedaron bajo arresto domiciliario, indicó la policía.
Por su parte la Comisión Europea anunció que «va a seguir toda la investigación», según explicó uno de sus voceros, Daniel Rosario.
«Esto es algo que la Comisión se toma muy en serio. Nuestra política es de tolerancia cero», subrayó recordando que los controles están a cargo de los Estados.
Más de 150 empresas están involucradas en el desvío de esos fondos, según indicó la ministra italiana del Interior, Luciana Lamorgese.
«Se necesita mayor vigilancia del sistema para acceder a los fondos de manera de evitar que los clanes mafiosos de apropien de las subvenciones europeas a expensas de productores y agricultores honestos», reconoció.
El dinero obtenido por la mafia de Tortorici, con vinculaciones con la poderosa mafia de Cosa Nostra, terminaron en cuentas corrientes de Bulgaria y Lituania.
Según el fiscal nacional antimafia Federico Cafiero de Raho, se trata de «un salto cualitativo en la mafia» que gracias a funcionarios preparados, los llamados «cuellos duros», logra «entrar en la economía legal con sistemas ilegales».
«No se trata más de delincuencia tradicional, como narcotráfico o extorsión, sino de fraude a una entidad internacional», recalcó.